Markus Witte es un alemán nacido en Munich, corazón de la Baviera.
Tiene 51 años, es Ingeniero Electrónico y recorre Argentina caminando a la vera de rutas y … totalmente descalzo!
El pasado viernes, llegando a la ciudad de El Trébol, en el Departamento San Martín, dialogó con El Trébol Digital: «Estoy caminando. Me quedé 4 meses en Buenos Aires y un día dije «no más, ahorita voy a caminar». El frío en Ruta 13 era tremendo, La sensación térmica, aún peor.
Witte contó que «No hay transporte, no hay nada así que camino. Ya caminé en Colombia y Perú. Normalmente lo que hago son retiros y pláticas sobre cómo es la vida y cómo funciona tu cuerpo».
El teutón, recorre Argentina totalmente descalzo, aún en las inclemencias del tiempo. «No uso zapatillas porque me da libertad. Llegué a Argentina a fines de febrero desde Chile ingresando por Salta y después en marzo fue a Buenos Aires».
ETD – Lo hacés por turismo?
«No hago turismo. Vengo a dialogar con amigos por el tema de no comer. Estuve un tiempo en Capital Federal pero me quedé atrapado».
ETD – Cómo es eso de no comer?
«Para eso tienes que conocer tu cuerpo. Tu cuerpo no vive de la comida. Yo no como y sólo de vez en cuando tomo. Hay que entender que la energía no viene de lo físico. Si viniera de ahí no deberían existir cadáveres ni muertos porque uno podría ingerir energía eternamente».
ETD – Y cómo subsistís?
«Yo hace más de medio año que no como. No lo necesito y vivo felíz. Si uno entiende de dónde viene la fuente de la energía uno puede dejar de comer. Hay que observar el cuerpo. El cuerpo es pura célula, la célula no come. La célula está llena de átomos y los átomos no comen. Si ellos no comen, tu tampoco tienes que comer. Ellas viven de una fuente y es tu fuente también. No es algo físico. Hay que preguntarse eso».
ETD – Ni siquiera probaste el famoso churrasco argentino?
No, Carne ya no como desde hace mucho tiempo. Comí de todo en mi vida pero ahora ya no. Siento que hace más daño que placer».
ETD – De qué vivis?
«No necesito nada, estoy libre. Voy por el mundo. Duermo por las noches y al día siguiente camino. Llevo una ropa de cambio, algo para dormir y algo para taparme. Paro unas horas por la noche abajo de un árbol y sigo. Si no necesitás nada, estás libre. Ahora voy a Salta».
Con una gorra de lana, unos pantalones y una bolsa en la que portaba sus pocas pertenencias, Markus siguió relatando: «Yo soy ingeniero electrónico. Estudié en México y trabajé en Alemania y en todo el mundo».
Amable, con un español correcto y ojos azules penetrantes, el caminante alemán relató: «Empecé en Buenos Aires, llegué hasta Pergamino y enfilé hasta la 178 hasta Las Rosas y luego la Ruta 13. Pasé por El Trébol, sigo a San Jorge, Santa Fe capital y de ahí al norte».
ETD – Hasta cuando estarás en Argentina?
«No lo sé. Pensé en irme en marzo pero pasó esto – la pandemia – así que no sé».
ETD – Y tenés dinero para pasajes?
«No manejo dinero».
ETD – Y cómo te vas a ir?
«Cuando tenga que llegar, llegará la oportunidad. Creo que iré a Perú y Colombia de nuevo. Pero no lo sé bien».