Cinco alumnos del Nacional serían los autores del ataque a la iglesia – Chicos de cuarto y quinto año habrían admitido su culpabilidad ante los jóvenes del centro de estudiantes. Primero se desmintió pero con el correr de las horas comenzaron a surgir supuestos responsables. Cinco alumnos del Nacional Buenos Aires serían los autores del ataque a la Iglesia San Ignacio de Loyola. Desde el centro de estudiantes aún no se atreven a confirmarlo pero deslizaron que son estudiantes que se oponen a la toma. El rector, Gustavo Zorzoli, tampoco identificó culpables e indicó que aún no saben quiénes fueron.
«La única iglesia que ilumina es la que arde», «Ni Dios ni amo», fueron algunos de los mensajes con los que se encontraron los miembros de la Iglesia San Ignacio de Loyola. Por la madrugada, un grupo de personas ingresó al establecimiento religioso, quemó el sillón del sacerdote, orinó el altar y escribió frases agraviantes. Desde la iglesia adjudicaron el ataque a algunos alumnos del Nacional Buenos Aires.
Alberto, sacristán de la parroquia, vinculó en forma directa los ataques con la toma del colegio. «Cuando bajamos a abrir la iglesia encontramos humo y daños», indicó a Crónica TV. En diálogo con el canal de noticias, agregó que los agresores «entraron por un túnel que conecta al colegio con la iglesia».
Durante la mañana los alumnos se desligaron del tema. «Estábamos amenazados por las autoridades. Nos dijeron que ante el mínimo disturbio íbamos a ser sancionados con la expulsión. Sería insólito e ilógico que nosotros hiciéramos eso», afirmó Nicolás Cernadas, vocero del centro de estudiantes del Nacional Buenos Aires, a Clarín. El joven explicó que el túnel que conecta al colegio con la iglesia «existe» pero «estaba roto». «El lunes a las 4 de la madrugada entraron autoridades al colegio. Les sacamos fotos. El colegio tiene tantas entradas y salidas que es imposible controlar todo», agregó.
El hecho se registró después de las cinco de hoy, cuando los agresores rompieron un candado de una puerta que divide la iglesia del colegio y forma parte de la Manzana de las Luces. Los atacantes prendieron fuego el sillón del sacerdote, al que ubicaron patas para arriba entre los bancos donde se sientan los feligreses durante las misas. Además, dejaron frases ofensivas -escritas con pintura blanca- en el piso, adelante del altar y en uno de los bancos.
Esta mañana, el vicario general de Buenos Aires, monseñor Joaquín Sucunza, el rector de la catedral, sacerdote Alejandro Russo y el párroco, Francisco Baigorria evaluaron los daños ocasionados.
La iglesia de San Ignacio de Loyola es la más antigua de la Ciudad. Fue construida por los jesuitas en 1675 y declarada monumento histórico en 1942. La primera construcción estuvo emplazada en la hoy Plaza de Mayo y bajo la advocación de Nuestra Señora de Loreto, pero en 1610, al ser beatificado el fundador de la Compañía de Jesús, fue rebautizada como San Ignacio de Loyola. En 1661, por razones de seguridad y defensa del fuerte de la ciudad, los jesuitas abandonaron la construcción de Plaza de Mayo y se trasladaron al solar delimitado por las actuales calles Perú, Bolívar, Alsina y Moreno, propiedad de una hacendada mujer que había enviudado sin hijos.
El templo actual data de 1675, cuando se inauguró la segunda iglesia, también de adobe. El 16 de junio de 1955, el edificio fue atacado por simpatizantes del presidente Juan Domingo Perón, quienes incendiaron la Curia Eclesiástica y otras nueve iglesias de Buenos Aires.
Fuente: Clarin.com