Comienzan a llegar las temperaturas cálidas y la comunidad aprovecha los espacios al aire libre para recrearse, realizar actividades deportivas o simplemente disfrutar de una tarde al sol.
No es para vanagloriarse pero El Trébol cuenta con innumerables espacios verdes que son orgullo de la ciudad y admirados por los foráneos, no sólo por la puesta sino por el mantenimiento y el cuidado que se les brinda.
Las viejas vías del ferrocarril fueron transformándose en un extenso paseo con juegos para chicos, un circuito aeróbico, mesas, parrilleros y puentes, que se mezclan con la naturaleza y los arboles de antaño tan característicos.
El Paseo aeróbico que fue extendiéndose primero desde Estanislao López hasta Rio Negro y hoy, desde calle 9 de Julio a Santa Fe, pasando por detrás del museo y con la proyección de unir el sur con el norte y conectar la plaza y el parque del barrio Plan Federal II, más conocido como las “96 viviendas”.
De día y de noche, por la amplia iluminación, la comunidad puede hacer uso de las comodidades.
No son casualidad esos cambios, no fue suerte, sino la decisión de un Gobierno que apuesta a las obras, al crecimiento de la ciudad, a mejorar la calidad de vida, a brindar espacios seguros, limpios y para el disfrute de la familia y amigos.