La cosecha de trigo llegó a su fin. Ya no quedan lotes por trillar en la zona de influencia de la Cooperativa Agrícola Ganadera de El Trébol Limitada y la realidad indica que el rinde estuvo muy por debajo de lo que se esperaba.
De los 35 quintales promedios estimados con anticipación a la cosecha, bajando a los 30 quintales una vez iniciada la misma, para finalmente terminar en los 25 quintales, los cuales obviamente no eran los previstos y deseados por nadie.
“Si bien habíamos arrancado con una expectativa de 35 quintales, después con el tema de la sequía, el granizo y las heladas, siendo tres factores que se sumaron de manera conjunta, lo cual es muy poco común que suceda, pero lamentablemente terminó pasando e impactando directamente en el rinde final, obteniendo un promedio de rinde del orden de los 25 quintales”, señaló Darío Bonfil, Ingeniero Agrónomo de la Cooperativa Agrícola Ganadera de El Trébol Limitada.
“Nos encontramos con muchos lotes por debajo de los 20 quintales la hectárea y muy pocos por encima de los 30 quintales y eso llevó a que el promedio de rindes sea muy inferior al esperado”, agregó Bonfil y continuó: “Lamentablemente la cosecha terminó 10 quintales por debajo de lo que se estimaba”.
Efecto de las heladas
Si bien en principio parecía que los daños causados por las heladas serían mínimos, finalmente terminaron causando más daño del previsto: “La helada afectó por sectores; o sea, había manchones dentro del mismo lote, donde a simple vista parecía estar bueno, sin embargo, estos manchones fueron más representativos de lo que parecía y esto se vio reflejado en el rinde final”, concluyó Bonfil.
