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Entrevista a fondo – El Intendente electo en una charla a fondo habló de su vida, su familia, y por supuesto de política. El Intendente de la ciudad de El Trébol, electo por cuatro años más, dialogó con El Trébol Digital distendido y nos abrió la puerta de su vida.

Mucho más abierto e igualmente explicativo a la hora de los detalles, el «Cabezón», como lo conocen sus amigos, traspasó los límites de su vida política y contó algunas intimidades de sus días fuera de la Municipalidad.

El triunfo en las elecciones

Sobre su triunfo en las elecciones del pasado domingo 27 de septiembre, Almada dijo: «Nosotros teníamos en nuestras previsiones y una gran expectativa de triunfo. Algunos números de los que manejábamos fueron coincidentes en que se iba a dar el triunfo y así se dio. También teníamos tendencias importantes a nuestro favor a Concejales que nos daban muy bien».

Qué hizo ese sábado a la noche antes de las elecciones?

«El sábado cené en casa porque hacía dos meses que no estaba en mi hogar, hice un asadito y me acosté a las doce de la noche. Me levanté a las siete y cuarto con la mala novedad de la lluvia y de ahí en más no paramos un momento. Fui a la Unidad Básica y se allí a trabajar con mi gente».

Le preocupó que lloviera ese domingo?

«Cuando ví que llovía me preocupé por la gente. Muchas familias y personas de edad había dicho que nos iba a votar y al llover así esto no favorecía para que llegaran al lugar de los comicios. Tratamos de acercar a la gente y al finalizar el escrutinio ver que rondó el 79% estuvimos conformes».

Siguió alguna cábala?

«Durante el domingo hice cosas por costumbre como la de votar a las 17:15 hs. Ya en el año 83 votaba a esa hora pero de vago para no levantarme temprano. Durante el día compartimos un par de sandwiches con la gente del partido y estuvimos atentos en atender a los fiscales generales que trabajaron».

Su esposa Rosana

Se suele decir que Almada trabaja mucho y que Rosana Mendoza, su esposa, es muy paciente y atiende a los hijos del matrimonio Abril de 3 años y Emiliano de dos años. «Yo conocí a Rosana en Menfis. Fue por el año 1997, estaba sólo y ella también y se dio», cuenta con una sonrisa Almada.

Rosana Mendoza es oriunda de María Juana y es hermana gemela de Rosaura. «Elegí a Rosana porque es mas linda», dice y se ríe Fernando.

El día que se vieron por primera vez fue un 25 de mayo y estuvieron 5 años de novios. «Rosana es muy paciente y me apoya mucho. Cuando nos conocimos yo era Concejal y me acompañó en la campaña del año 1999. Vivió alegrías y amarguras que son muchas siempre», dice Fernando y agrega: «Trato de separar las cosas siempre cuando llego a casa para no ensuciar la relación».

Las anécdotas no se demoran en llegar cuando habla del matrimonio y de la tranquilidad de su esposa: «Recuerdo una vez a en un cierre de listas que yo no era candidato, viajamos a Santa Fe y por demoras volvimos a las 5 de la mañana. Cualquier esposa se preocupa pero ella al llegar me abrió la puerta y sólo me preguntó si hacía frío».

Sin dudas, ante la vista del pueblo, la esposa del Intendente sigue siendo una persona simple a la que el puesto de su marido no le cambió la vida en absoluto. «Ella sigue andando en la misma bici que se compró hace cuatro años, lo único que hizo fue ponerle dos asientitos para mis hijos. Por mi parte, yo no soy de salir, soy de perfil bajo y me da placer estar en mi casa en los momentos libres».

Las peñas

La vida social de Almada fuera de su casa se centra en peñas con amigos. «Tengo dos peñas, una los miércoles y otra los viernes pero semana de por medio. Los viernes nos juntamos con mi hermano Juan Carlos y Cali Colazzo pero somos unos 15 porque está Gisolfi, Fuggini, los Di Sante, Sosa, Piumetti y el lugar varía. Los miércoles nos juntamos con Damián Degano Ferdi Mondino y Saúl Degano».

Se considera tímido?

«Soy tímido pero tuve la capacidad de poder superarlo para lograr algunas cosas. Mis funciones requieren de un esfuerzo doble porque soy una persona pública pero con una gran timidez».

Usted es de El Expreso. Como vivió la noche del Centenario de Trebolense, en la que estuvo presente?

«En la cena de Trebolense la pasé muy bien. Aimone me trató muy bien y siempre lo hace. Yo soy de El Expreso pero no me considero un fanático. Hace mucho tiempo que no voy a la cancha».

Piensa ser Intendente por muchos años más?

«Ocho años es suficiente. Creo que hay que tener la capacidad de entender que debe haber un recambio natural y si uno de perpetúa se desgasta. Fijate que en la ciudad de Armstrong y después de 20 años, el Intendente Fisher, con todo lo que salió en televisión nacional últimamente, fue a una elección y perdió. Hay que retirarse antes de que la gente lo retire a uno. Hay que formar gente que permita sucederlo en el tiempo».

No sigue en el 2013 porque hay pactos con el PJ?

«No hay pactos para que me suceda otro. Hay algunos compañeros que me dicen que no hay que mencionar ciertas cosas pero no hay cosas raras. Hay necesidades partidarias, pero yo mismo planteé lo de los dos períodos pero quizás en el 2017 o 2021 si se dan las condiciones me postule».

Hableme de Marcelo Turletti.

«Marcelo Turletti es una persona que está comprometida con la cuestión pública y tiene trayectoria. Creo que en esta campaña modificó su conducta seguramente por el entorno. Hubo cosas del entorno que lo hicieron cambiar mucho».

Hableme de Pablo Candiz.

«No tuve nunca un trato con él».

Cuando se sintió ganador?

«Me sentí ganador al escuchar la transmisión de 90.5 Stereo Vida. La radio manifestó en un momento lo de una proyección y generó la algarabía en la Unidad Básica.

Porqué hoy está en la misma línea de Sanchez, siendo que antes estaba en otra?

«Gustavo se inició en el 97 cuando yo era Concejal. En aquel momento, con Ley de lemas estábamos sin saber porqué en diferentes sectores y así se transitaron veredas distintas. Tiene una enorme visión de la actividad política y compartimos la forma de ver las cosas. La madurez nos llegó a todos. A Gustavo, a Alfredo Muya y a mí».

Qué hizo el día después del triunfo?

«Me levanté y me fui a trabajar como cada día, lo único es que a las dos y media de la tarde me fui a mi casa, porque casi siempre me voy mucho más tarde».

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