Feroz golpiza a un menor – Ocurrió en la tarde del lunes en el predio del ferrocarril. Un joven fue ferozmente golpeado en la tarde del pasado lunes en el predio del ferrocarril. Se trata de Mariano Garnero, de 17 años, que fue víctima de un hecho patoteril alevoso siendo agredido por una veintena de sujetos.
La crónica de los hechos
Cuando Mariano Garnero, un joven de 17 años de edad llegó a su casa de la calle Emilia Bertolé a las 14 hs. del lunes a dejar la camioneta y tomó su ciclomotor Motomel 110 cc. para ir al Predio del Ferrocarril a compartir los festejos del Día del Amigo, nunca imaginó lo que le iba a pasar.
El joven se detuvo a dialogar con un amigo frente al Corralón de El Constructor, cuando un sujeto que estaba en el predio se abalanzo sobre él, comenzó a insultarlo y a golpearlo. En un abrir y cerrar de ojos, una veintena de jóvenes que estaban con el agresor se llegó hasta el lugar para sumarse a la golpiza por lo que Mariano dejó la moto y trató de defenderse como pudo. Al liberarse de los golpes, comenzó a llamar a su padre Dante, que de casualidad estaba en la esquina a bordo de la camioneta junto a su esposa Jaquelín, su hija Julia de 10 años y una amiga.
Al ver la gresca, el padre y la madre de Mariano se bajaron para rescatar a su hijo pero terminaron siendo agredidos ferozmente. Fue «Cachi» Muya, propietario de la firma El Constructor, quien los rescató del tumulto y los metió en el predio privado, pero Dante tuvo que salir para buscar la camioneta y a las menores que estaban dentro, mientras los jóvenes enceguecidos tomaban a patadas y piedrazas al rodado.
Heridos
Como consecuencia del episodio, Mariano, de 17 años, resultó con lesiones en costillas, cabeza, piernas y manos, su padre Dante y su madre Jaquelín con golpes en la espalda y la cabeza y hasta fueron arrastrados de los cabellos.
Destrozos materiales
La moto del joven terminó destrozada y la camioneta abollada. «Tengo miedo a nuevas represiones, hablaré con la policía pero me llama la atención de la poca intervención que tuvo porque llegaron tardísimo». Señaló Dante Garnero, padre del joven golpeado.
