El campeón de Europa ganó 1-0 con gol de David Villa.

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España pasó a Portugal y cada vez es más candidato – Había dejado dudas en el primer tiempo y le costó quebrar a su rival, pero una vez que concretó la ventaja cerró el partido con tranquilidad. En cuartos, enfrentará a Paraguay. Con serias dificultades para imponer su juego en el primer tiempo, España encontró en una combinación entre sus tres figuras la llave para destrabar el partido y derrotar 1-0 a Portugal, lo que permitió avanzar a cuartos de final y esperar a Paraguay el sábado en Johannesburgo. En el balance la victoria no admite discusiones, aunque el ganador dejó dudas y deberá ajustar unas cuantas cosas.

La pasó decididamente mal España en el primer tiempo. Astutamente, la línea de cuatro volantes portugueses se ubicó diez metros en su propio campo y recién allí decidió darle pelea al favorito. Thiago, Pepe, Meirelles y Simao maniataron a Iniesta y a Xavi y los obligaron a encadsenar errores. Y de no ser por la falta de precisión en la puntada final, suyo pudo ser el período inicial.

Fue de España, en general, el control de la pelota. Pero lo suyo se fue diluyendo conforme se fue aproximando al área rival. Y para colmo, las estocadas portuguesas encontrando cierta endeblez defensiva, sobre todo en el arquero Casillas.

Tres jugadas claras de gol ofrecieron los 45 iniciales, y dos de ellas favorecieron a Portugal. Villa, el delantero más peligroso de la cancha y recurso excluyente de España, remató de derecha y Eduardo tapó con esfuerzo. Pero Meirelles a los 20 (notable jugada colectiva) y Cristiano Ronaldo a los 27 (su tiro libre le estalló en el pecho a Casillas) arrimaron peligro cierto.

El desarrollo parecía repetirse en la reanudación. Y un rechazo contra su arco de Puyol a los 6, que casi se mete, pudo poner en ventaja a Portugal. Del Bosque mandó a la cancha a Llorente por el ausente Torres. España seguía avanzando pero no tenía precisión y se exponía a las réplicas. Hasta que apareció la exactitud que el campeón de Europa trajo a Sudáfrica.

Hubo un anuncio a los 15, cuando Llorente ensayó una palomita frente a Eduardo (con eso ya hizo más que Torres) y el arquero tapó como pudo. En el mismo minuto, Villa sacó un derechazo cruzado apenas desviado. Y a los 17, la Furia española se convirtió en ventaja parcial: Iniesta tocó punzante hacia adentro, Xavi la acarició con la suela y Villa remató primero de zurda (tapó el arquero) y luego de derecha. Uno a cero y comienzo de otro partido.

Sergio Ramos recibió un gran pase de Iniesta y casi anota el segundo a los 24. Portugal abandonó la línea del comienzo y España mostró la convicción y la seguridad que le faltaban. Iniesta y Xavi se hicieron dueños de la situación, Sergio Ramos escaló con insistencia y Villa fue imparable. Casi marca Villa su quinto gol a los 31 desde 25 metros, pero Eduardo volvió a ganarle.

Ausente, fastidiado y peleado con el mundo Cristiano Ronaldo, Portugal mostró ganas de empatar pero no ideas. Villa tuvo tiempo de servirle el segundo a Llorente (que lo erró) antes de dejarle su lugar a Pedro. El árbitro argentino Héctor Baldassi siguió componiendo una tarea casi sin fallas (pareció que David Villa recibió en la misma línea que el último defensor en el gol). España, complicada al principio, encontró la luz en una maniobra pergeñada por sus tres mejores hombres, y luego se acomodó hasta arribar al final. El sábado chocará con Paraguay, que acaso haya visto este duelo y sienta que no todo está perdido.

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