Lula se rapa y se afeita la barba en medio de su quimioterapia – Hace dos semanas inició un tratamiento contra un cáncer de laringe. Con paciencia y ternura, su mujer lo rapó. Le cortó todo el pelo y le afeitó la barba. Y le dio una apariencia completamente diferente. En medio de sus sesiones de quimioterapia para luchar contra un cáncer de laringe, el ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, decidió adelantarse a los efectos colaterales del tratamiento y cortó por lo sano: apenas se dejó un tímido bigote.
Lula comenzó con sus sesiones de quimioterapia hace dos semanas, el 31 de octubre para hacerle frente a un cáncer de laringe que le detectaron los médicos.
Según el Instituto Lula, que difundió una serie de fotografías con la nueva apariencia del ex mandatario, fue su propia esposa, Marisa Leticia, la encargada del cambio.
En las imágenes se lo puede ver a Lula, muy sonriente, mientras su mujer termina de afeitarle las mejillas, llenas de espuma, con una maquinita.
Marisa Leticia lo abraza por la espalda en otra de las imágenes. Cariñosa con su esposo, la ex Primera Dama de Brasil lleva puesta una remera de manga larga con el logo de una campaña internacional contra el cáncer de mama.
La barba era una de las marcas registradas de Lula desde que surgió políticamente a finales de los años 70 como sindicalista.
El director del gremio de metalúrgicos, Moisés Selerges, llegó a sugerir que toda la cúpula de la entidad se rapase la cabeza en solidaridad con Lula.
Lula, de 66 años, recibió el pasado 29 de octubre un diagnóstico de cáncer de laringe y dos días después empezó el tratamiento con quimioterapia en el Hospital Sirio Libanés de San Pablo, donde le descubrieron la enfermedad.
El ex presidente permaneció sólo unas horas en el hospital y luego se recluyó en su apartamento en Sao Bernardo do Campo, ciudad vecina de San Pablo, donde ha continuado con el tratamiento.
En su residencia, Lula ha recibido desde entonces la visita de varios políticos brasileños, entre ellos la presidenta Dilma Rousseff, su sucesora.
Rousseff, que también se trató de un cáncer linfático en el Sirio Libanés cuando todavía era ministra de Lula en el año 2009, lo visitó el pasado 10 de noviembre y afirmó luego que el ex mandatario estaba «muy bien».
La Presidenta de Brasil lo visitó en esa ocasión junto con el ministro brasileño de Salud, Alexandre Padilha.
En su casa, Lula recibe los remedios que le recetaron los médicos por vía intravenosa y ha recibido también innumerables muestras de apoyo de dignatarios extranjeros, políticos brasileños y ciudadanos anónimos.
El equipo médico descartó realizar una cirugía por el estadio inicial del tumor y porque es de agresividad media y consideró que la probabilidad de cura es alta, dado que el cáncer está localizado y no ha hecho metástasis.
«Estoy preparado para enfrentar otra batalla y creo que vamos a conseguir» vencer el cáncer, dijo Lula tras pasar por la primera de esas sesiones. Hasta enero seguirá recibiendo dosis de quimio para luego comenzar con radioterapia.
Fuente: EFE y AFP
