El cuarto oro argentino llegó por el taekwondo – Además, el ciclismo aportó un bronce en persecución masculina por equipos. Fue un día dorado para Argentina. Tras la exitosa mañana del remo en Ciudad Guzmán, con tres oros, por la tarde, en el DOMO II de la ciudad de Guadalajara, Sebastián Crismanich consiguió la cuarta presea dorada para la delegación nacional al derrotar por 13-9 al venezolano Carlos Vásquez, en la categoría de menos de 80 kilos.
Desde el inicio, el argentino salió con potencia a buscar el triunfo. En la primera acción, Vásquez terminó con dolor en una pierna, de la que se quejó continuamente durante el combate, provocando la atención médica en varios momentos. Lejos de cuidarse, Crismanich siguió buscando al venezolano y así sacó una ventaja de cinco puntos para el 7-2. El primer asalto, igualmente, terminaría con una ventaja de dos (7 a 5).
En el segundo, ambos se cuidaron y así casi ni se cambió el tanteador (8-5), hasta que en el último -contra todos los consejos de su entrenador- el argentino fue agresivo y consiguió el definitivo 13-9 que le permitió colgarse la medalla de oro en el pecho para festejar, con el himno argentino de fondo, ser el nuevo campeón de los Juegos Panamericanos.
Al final la pelea, Crismanich dijo estar «muy contento por toda la trayectoria hecha en este campeonato». «Los tres primeros combates los gané muy ampliamente y la final decidimos ir a buscarlo en el último round por si hacía falta y el temperamento me llevó a estar ganando y seguir buscando, lo que hizo que me empareje la pelea. Pero logré sacar un margen para ser campeón», explicó.
«La energía que tenía adentro iba más allá de mi cabeza y a veces no me podía frenar por más que así lo decía el coach», agregó el argentino, que se retiró entre los aplausos, las fotos y los saludos del público mexicano. «Es uno de los torneos que voy a recordar por siempre, es una de las mejores medallas que sin duda tengo en mi haber. Estoy muy contento. Espero que a partir de esta vengan muchas más», cerró.
Antes, en la primera presentación del abanderado argentino, el ciclista Walter Pérez, hubo medalla para Argentina, la séptima para el hombre de San Justo en cinco Juegos Panamericanos. Esta vez, fue de bronce en la prueba de persecución, donde el conjunto compuesto por el mencionado Pérez, Maximiliano Almada, Marcos Crespo y Eduardo Sepúlveda le ganó al local México.
«Estoy muy cansado», dijo tras la prueba Walter Pérez, quien competirá individualmente en la categoría Omnium. Es que el equipo argentino luchó y logró alcanzar al mexicano sobre el final, sin tener que completar los 4.000 metros. Así, Argentina cumplió con la prueba en 3:05.333. Con este bronce, además, el ciclismo argentino sumó su decimonovena medalla en la historia de los Panamericanos.
En cambio, el equipo de velocidad, compuesto por Leandro Botasso, Jonathan Gatto y Facundo Lezica, cayó con el duro conjunto colombiano en la pelea por el bronce. La diferencia fue de casi un segundo, ya que los colombianos cerraron un tiempo de 45,80 contra 46,725 de los argentinos.
Las otras actividades del día
En el handball femenino, Argentina sumó su segunda victoria y continúa invicta en los Panamericanos. Esta vez el triunfo fue por 28 a 20 a Chile. En natación, en tanto, la argentina Cecilia Biagioli terminó quinta en la final de 400 metros libre con un tiempo de 4m15s41/100, casi cuatro segundos más lenta que la ganadora de la prueba, la estadounidense Gillian Ryan. También entre las mujeres, en las finales por elementos de gimnasia rítmica, las argentinas Ana Carrasco Pini y Darya Shara terminaron quina y sexta en aro y sexta y octava en pelota, respectivamente.
