El FMI pide a España que sea más valiente y radical en los ajustes – Le reclama además «un audaz fortalecimiento» en la flexibilización laboral, en un país con cinco millones de desocupados.
El FMI cree que los implacables ajustes realizados por España sólo han llegado a la mitad y, para prevenir los riesgos, propone ahondar en la reforma de la legislación de negociación colectiva de salarios, abaratar aún más los despidos y terminar con el empeño sindical de ligar los aumentos salariales a la inflación .
La venerable organización internacional se las arregla otra vez, en su informe anual sobre España, para proporcionar los consejos más dañinos a países con graves problemas económicos y sociales.
Según los especialistas que elaboraron el informe, España tiene que ser «más valiente» para abaratar con mayor energía los despidos . No se puede dar tregua, advierte, a una más radical transformación de la negociación colectiva de salarios y, repite varias veces, terminar de equiparar los aumentos salariales a la inflación y hacer que las mejoras dependan de la productividad.
El gobierno (socialista) de José Luis Rodríguez Zapatero después de reiterar con entusiasmo, hace aproximadamente un año, que no existía ninguna crisis sino una «desaceleración», se enfrentó a un ataque generalizado de los mercados que provocaron situaciones de escándalo en las bolsas que equiparaban a España con Grecia.
La UE se unió a la presión hasta que se lograron unos planes de ajustes muy duros para disminuir el déficit fiscal y recortar beneficios de la reforma laboral y la negociación colectiva de salarios.
En el primer caso, los sindicatos respondieron con una huelga general que tuvo éxito y debilitó considerablemente el prestigio del gobierno (socialista). La reforma de la negociación del gobierno no conformó ni a los sindicatos ni a la patronal.
Mientras tanto, la crisis arrasaba con particular saña a los españoles con menos recursos: casi cinco millones de desocupados, 44,6 % de desempleo en los jóvenes, los jubilados castigados en el primer plan de ajuste y con magros ingresos.
España duplica el promedio de desocupación en Europa y lo mismo sucede con los jóvenes. Un millón y medio de familias no tienen ingresos ya que todos sus integrantes en edad activa se han quedado sin seguro de desempleo.
La crisis se alarga porque la caída del consumo ha sido catastrófica y ha paralizado la economía que no levanta cabeza como ha sucedido con otras economías europeas. Algunos economistas opinan que salir de la crisis tardará una década . Otros creen que es demasiado. Sin embargo, hasta ahora han sido los peores augurios los que se han cumplido.
Y a pesar del alto precio que ya paga la sociedad española por la crisis, el FMI exige más ajustes en los términos más duros posibles . Y subraya que hace falta «un audaz fortalecimiento de las reformas».
«No puede haber tregua en el impulso de la reforma, incluso mejorando aún más la credibilidad de la consolidación fiscal, completando la reestructuración del sector financiero, fortaleciendo con valentía las reformas del mercado laboral, y dando seguimiento a la agenda de reformas estructurales», opina.
Imparables, los funcionarios internacionales proclaman que «si la reforma recién aprobada no da resultados rápidos, debe aprobarse una reforma más radical » Así, «la política (laboral) debe pecar por exceso de audacia en vez de gradualismo», sostiene.
Los resultados de esta política, que el Fondo alaba con entusiasmo, cayeron bastante mal a los electores españoles .
Las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo pasado se convirtieron en una debacle para los socialistas que perdieron frente al Partido Popular por diez puntos. Se produjo un trasvase histórico, inédito en la historia política moderna española, de los poderes municipales y también de las autonomías.
Los empresarios que tienen buen instinto para cuidar de sus intereses, aclararon que les parece más necesario finalizar con el proyecto de reformas que adelantar las elecciones como piden a voz en cuello los populares. El FMI les ha vuelto a mostrar el camino.
Fuente: Clarín.com
