El estado lamentable de la Ruta 34 no es una novedad para quienes la transitamos a diario. Muchas fueron las promesas de convertirla en autopista o autovía, pero el tramo que une la Ruta 19 con Rosario lleva décadas de ser solo una promesa de campaña.
En los últimos años el deterioro se agudizó, y con esta situación aumentaron los accidentes, dentro de los cuales hubo que lamentar víctimas fatales que se podrían haber evitado, a lo que se le suma, como agravante, el problema de los servicios provinciales de emergencia, que carecen de medios idóneos para dar una pronta respuesta.
La ruta 34 no solo es circuito de la producción, también es el nexo entre ciudades para los vecinos de la región, y es la conexión fundamental para la derivación de pacientes a centros de salud de ciudades como Rosario o Santa Fe.
“Es una ruta destruida que es un peligro para todos los santafesinos. Necesitamos que todos los políticos que son pre candidatos a presidente de la nación, de todos los sectores, se comprometan a transformar las miles de promesas sobre la “34” en una obra concreta, por la salud y la tranquilidad de todos”, expresó Esteban Motta.
La histórica falta de mantenimiento de la calzada, y el incumplimiento de las promesas de transformar la misma en una autopista, sigue transformando a esta importante vía de comunicación en un peligro para quienes la utilizan o viven frente a ella.
