Había que volver a empezar y así lo entendió Trebolense. Después de una mitad de año muy dura, el «Celeste», comprendió y entendió eso de tocar fondo para volver a surgir.
Así también lo entendieron el Pato Martinez y Federico Pignatta, que se hicieron cargo del plantel en el momento más difícil.
Trebolense ganó la copa integración porque tomó el desafío con compromiso, seriedad y mucha humildad. Hizo oídos sordos a las palabras necias, y un grupo de pibes con mucho hambre decidieron salir a la cancha a hacerse valer por lo que son.
Trebolense derrotó 2 a 1 en la final a Unión de Sastre. Los goles los marcaron Emanuel Campos y Alexandro Suarez, pero el alma y el sacrificio lo pusieron todos.
El regreso de algunos jugadores le dio un aire fresco al club, que junto a la reciente contratación, de Lugo, le da al equipo de la dupla Martinez-Pignatta un futuro mucho más prometedor.
Pero ahora es momento de festejar!