Con la sanción de la Ordenanza Nº 1.498 de adecuación y reglamentación de la separación domiciliaria y disposición inicial de los Residuos Sólidos Urbanos (RSU), se profundizan los alcances de la gestión de residuos, en particular en relación a las obligaciones del manejo de los mismos desde que son generados por cada familia o empresa.
La Municipalidad viene promoviendo prácticas responsables en el cuidado del ambiente y realizando variadas actividades educativas, y si bien este acertado accionar ha permitido muy buenos resultados, aún falta mucho por mejorar, por lo cual es necesario profundizar en la materia.
Con la sanción de la ordenanza, quedan estipuladas responsabilidades y obligaciones, y puntualmente, se determina que quien genera residuos, tiene la obligación de realizar la separación establecida y la correcta disposición inicial en el cesto instalado frente a su domicilio, en los días y horarios establecidos por el municipio. En casos de residuos recuperables, como plásticos y latas, éstos también se pueden disponer en los “EcoCestos Amarillos”, ubicados frente a las escuelas de la ciudad.
“La ordenanza, viene a dejar muy en claro que todo generador, especial o individual, es responsable de los RSU que genere, y también de lo que suceda con los mismos hasta el momento de ser retirados por el sistema de recolección municipal, y al mismo tiempo, apunta a que la comunidad vaya adoptando cada vez mejores prácticas responsables en el manejo de los mismos, contribuyendo así a la economía circular y a avanzar hacia un entorno más limpio y saludable para todos”, expresaron entusiasmados desde el área de Ambiente.
También establece sanciones para el abandono, depósito o arrojo de RSU en la vía pública, espacios verdes o lugares no permitidos, además para quien no cumpla con la separación y disposición inicial respecto a días y horarios establecidos, y para otras acciones contrarias a lo dispuesto en la Ordenanza Nº 1.498.
Hagamos entre todos una ciudad ambientalmente responsable.