El robo de cableado viene siendo una constante en toda la región y los clubes de la zona han sido víctimas de sustracciones que terminaron siendo costosas para las arcas de las diferentes entidades.
Trebolense, que sufrió el robo de cables en tres oportunidades, reforzó su sistema antivandálico en el campo de deportes y en el Campus de entrenamiento deportivo.
En éste último, incorporó un sereno, nueva iluminación, refuerzo de cajas y tableros, más cámaras y un sistema para evitar la subida a columnas por parte de los delincuentes.
Acciones preventivas
«Triplicamos las medidas de seguridad hasta lograr algo óptimo. El club, ya está totalmente video vigilado con más de 30 cámaras de seguridad. Además, mejoramos la iluminación en algunos sectores claves, incorporamos personal por las noches y sumamos, a cada columna, un sistema que evita que una persona se pueda trepar para robar cables», destacaron desde la institución.
