En la antesala del primer aniversario de la obtención de la Copa del Mundo en Qatar, Tinka, la única fábrica de bolitas de Sudamérica ubicada en la ciudad de San Jorge lanzó una edición especial en conmemoración a la hazaña de la Selección Argentina.
Se trata de una colección de 30 canicas que contiene el plantel del combinado albiceleste. “Esto superó todas las expectativas que teníamos. La primera tanda ya se agotó y estamos produciendo la segunda. Recibimos llamados de Uruguay, España, Italia, Canadá y Estados Unidos para llevar los productos”, le dijo totalmente sorprendida Mariana Chiarlo, una de las dueñas de la firma, a este medio.
La “Batalla de Lusail” será recordada por la eternidad por todo el pueblo argentino. Y a días de aquel 18 de diciembre Tinka revolucionó el mercado. La colección “Campeones del Mundo” consta de 30 canicas en total: 26 de ellas identificadas con los jugadores que levantaron la Copa en Qatar, otra perteneciente al entrenador Lionel Scaloni, y las 3 bolones restantes con imágenes icónicas. “Esto es un trabajo totalmente artesanal. La bolita se hace como el resto, pero los sticker se pegan uno por uno para luego pasar a un proceso donde se eleva hasta los 500 grados de temperatura que provoca un efecto donde parece que la imagen se encuentra dentro del vidrio. Además, toma la consistencia del mismo y hace que al rascarla no se salga”, detalló Chiarlo sobre el modo de producción.
Desde la empresa ubicada en San Jorge recordaron el origen de la brillante idea que se transformó, por estos días, en un éxito comercial con consultas que llueven desde diferentes partes del país y el mundo. “Cumplimos 70 años y se nos ocurrió hacer algo distinto. En algún momento habíamos realizado algo similar con los clubes, entonces nos aventuramos en recuperar ese estilo que había sido muy bueno. Al aproximarse el aniversario de la Copa del Mundo de Qatar, dijimos que era por ahí”, explicó la empresaria.
La colección, que es furor y rompió todas las redes al momento de ser anunciada, se puede conseguir en los kioscos de todo el país. Desde la fábrica aún no salen del asombro por la repercusión mediática y social que tuvo la edición de bolitas. “No fue nada fácil. Estábamos en el peor de los momentos porque no había precios de nada, existían faltantes de insumos porque algunos de ellos son importados. Pero a pesar de eso, fuimos hacia adelante y la verdad es que fue un éxito porque la primera edición está agotada”, indicó Chiarlo.
Así, en Tinka ya se encuentran en una nueva línea productiva para abastecer al mercado que no cesa los pedidos. “La segunda tanda saldrá en 15 o 20 días al mercado. Generalmente, en enero la fábrica se toma vacaciones porque hace mucho calor y trabajar con las altas temperaturas de los hornos es imposible. Pero en esta ocasión, hasta que no tengamos finalizada este próximo lanzamiento no vamos a frenar”, anticipó Chiarlo dando cuenta del fuerte impacto que tuvo en la sociedad, y agregó: “De acuerdo como sea la venta, pensaremos en una tercera. Nunca imaginamos esta repercusión”, contó.
En Tinka manejan cautela antes de dar un paso más y romper las fronteras nacionales del mercado. “Hemos recibido llamados de Uruguay, España, Italia, Estados Unidos y Canadá”, adelantaron. Sin embargo, dejaron en claro que aún no es el momento de salir al exterior. “Apenas podemos cubrir las calles nacionales. Con lo cual primero está el abastecimiento a nuestro país que es el que hace 70 años nos compra los productos. Luego, si tenemos remanente, lo exportaremos”, concluyeron.
Fuente: El Litoral