Al día siguiente de la derrota 3 a 1 ante San Martín, el «pato», Héctor Martinez, volvió al club para comenzar a trabajar.
Como si el año recién empezara, el DT, ya estaba pensando en lo que vendrá. «El partido ya pasó. Hice un balance de estos meses en los que me tocó estar y puedo decir que al llegar encontré a los pibes bajoneados mentalmente. Fuimos trabajando día a día y semana a semana con el convencimiento de salir de donde estábamos. Y así llegamos a una final, con pibes predispuestos. Dejamos grandes equipos en el camino que se habían armado muy bien».
Al referirse a la última final, el DT fue contundente: «San Martín golpeó en el momento justo y yo no tengo nada que reprochar a los jugadores. Los chicos hicieron todo lo posible para poner a Trebolense en lo más algo. Llegamos con pibes tocados, enfermos, infiltrados y hasta con 38 grados de fiebre, pero no es excusa porque en la cancha, cuando entraron, se entregaron al 100%».
El mismo lunes, el grupo de la sub comisión comenzó a trabajar en el proyecto 2023, una noticia que alegró a Martinez y su gente. «Me pone contento que ya se trabaje pensando en el 2023. Habla bien del club, nos tienen en consideración a nosotros y a los jugadores. Hay que corregir cosas, para que no pasen otra vez. En estos días, hablé con muchos chicos y hay mucha gente que nos agradece por la calle y eso habla bien de nuestros pibes».
Y al referirse a su motivación, manifestó: «Imaginate que ya estoy en el club, trabajando en lo que vendrá. Trabajaremos en un nuevo ciclo que tendrá a Trebolense, seguramente, en lo más alto».
