Horacio «La Mona» Dominguez y Darío Luis «El Pato» Pietrani, fueron compañeros de equipos, compitieron por el arco de Trebolense en los 80 y en los 90 y fundamentalmente, fueron amigos.
Eran tiempos de jugar muy por la camiseta, de entrenamientos duros y no abundaban los grandes resultados. Ambos llegaron a la final en el año 92 con el «Cele» y perdieron en el tercer partido en Piamonte ante San Jorge.
Tras la desaparición física del «Pato», la «Mona mantuvo un diálogo con El trébol Digital en el que comentó: «Uno está tratando de sobrellevar lo que le pasó a un amigo así. Con Darío compartimos desde las inferiores. Yo estaba en «Tercera» y él estaba en «Quinta». Peleamos la titularidad con lealtad y compañerismo, como era él. Al que letocaba atajar, siempre recibía el aliento del otro».
Una parte de la historia
Darío Luis Pietrani debutó en el ultimo partido del campeonato de 1984, con Alberto Bonino como Director Técnico. Ese campeonato terminó en enero de 1985. Trebolense enfrentaba a «Centenario» y ese día – muy caluroso, con casi 35 grados – Jorge Laurenti no jugó. Bonino lo hizo debutar al «Pato» con 16 años. Trebolense ganó 2 a 0 en el «Centenario».
En el año 1992, Trebolense hizo una gran campaña, llegando hasta la final. Horacio recuerda así el momento. «Ese año el «Pato» se lesionó y empecé atajando yo. Los dos estábamos en un gran nivel y el «Alemán» Huens y Marito Martinez nos juntan y nos dicen que íbamos a atajar un partido cada uno. Era un compañero del fútbol y un mejor amigo».
Jugaron muchos años, fueron de los inoxidables del fútbol de la Liga. «En los últimos años nos cargábamos, nos tratábamos de viejitos y en los entrenamientos nos matábamos a full. Fuimos un espejo de los que venían atrás», recordó la «Mona» y agregó: «Fuimos muy leales en los entrenamientos. Ambos nos apoyábamos. El «Pato» fue lo mejor que me tocó en el fútbol. Cuando me fui a atajar a otro lado, él me hacía saber que le ponía contento que me fuera bien».
Ambos jugadores se retiraron pasados los 40 años. «Es que nuestra exigencia era al máximo. Cuando los jugadores hacían 20, nosotros hacíamos 21. No fumábamos, nos cuidábamos en la comida pero esta enfermedad de m… nos pega muy duro».
ETD – ¿Cuándo hablaste por última vez con el «Pato»?
«La última vez que hablé con él fue en la EPE, fui a gestionar que sacaran un poste y nos pusimos a hablar. Y después, en la «Canchita del cura». Yo me corté el tendón de Aquiles y él me dijo que era distinto no verme en el arco contrario. Fuimos tan a la par en todo, que hasta nos enfrentábamos en la «Canchita del cura» y teníamos la valla menos vencida, los dos, junto a «Chamaco» Taborda. Era tan bueno, que siempre nos encontrábamos y la amistad no se perdía».
ETD – ¿Cómo lo despediste?
«Lo despedí con muchas lágrimas, el «Pato» merecía seguir viviendo, por su gente, su mujer, su familia, su mamá, sus hijas y su nieto. No se puede creer. Hay mucho dolor, hay que cuidarse, porque esto no es una joda».
Homenaje de Trebolense
Horacio quiso resaltar: «Quiero agradecer a Trebolense por el homenaje que hizo al «Pato». Fue muy emotivo iluminar el arco toda la noche. De todas maneras, los homenajes hay que hacerlos en vida, siempre es mejor, pero estoy muy contento con lo que el club le hizo a Darío, me puso orgulloso de mi club y el «Pato» se lo merecía».
HOMENAJE – El arco iluminado de Trebolense en el día del fallecimiento del «Pato».
Y añadió: «El día del entierro, yo estaba en un campo y me fui al cementerio. Estaba la mamá que lo vio crecer y había tanta gente, que él, como ángel que es ahora, seguro lo vio».