Mario Galleano llegó al Club El Expreso con su camiseta, como cada domingo de cancha. Sus dificultades motrices, no le impidieron ir a plantar el árbol familiar, junto a su pareja “Yoli” y sus sobrinos Carlitos y Marcela.
Ellos, fueron a plantar el árbol de la familia Galleano/Dalman en el marco del Proyecto 100 árboles 100 familias expresistas.
“Veníamos acá y no había nada”, arrancó diciendo Mario Galleano y se emocionó al punto de no poder hablar más.
Dalman, “Carlitos” para la gente del club, continuó: “Venimos la familia Dalman /Galleano; Mario es primo de mi mamá, hinchas de El Expreso de toda la vida. Mario ha venido a la cancha anterior de muy chiquitito, yo también como jugador y ahora como dirigente”.
“Estamos muy contentos y esto es una obra a futuro, esto seguramente lo van a usar los que nos sigan a nosotros, nuestros hijos. Esa es la idea, que esto esté parquizado para el futuro”, siguió.
Un poco más recuperado, pero con la nostalgia reflejada en sus ojos, Mario agregó: “Acá sufrimos y gozamos. Lo vimos como un campito y ahora es un gran club”.
Estas historias se repiten en cada jornada de plantación, sostuvieron desde la institución.
