Después de 6 meses de pandemia, el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, se animó a hacer una proyección acerca de cuándo los alumnos podrán retomar sus estudios de manera presencial. “La expectativa que tenemos es que en marzo pueda haber un regreso general a las aulas en todo el país”, admitió.
De esa manera, contradijo a la ministra de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña, quien había pronosticado el regreso a las clases presenciales en todos los niveles antes de 2021.
“Venimos dialogando hace varias semanas con la Ciudad tratando de trazar un camino común. Acordamos algunos aspectos: priorizar la respuesta a los chicos y chicas que no han tenido vinculación con la escuela que el gobierno porteño determina que son 6500 chicos. En segunda instancia, construir un indicador que nos permita proyectar un regreso seguro a las clases. Para eso mañana vamos a tener una segunda reunión. Y el tercer punto es que nosotros planteamos es que una vez que estén dadas las condiciones, la vuelta a la escuela no será en las plazas”, aclaró Trotta luego que desde la Ciudad deslizaran esa posibilidad.
El ministro dijo que nunca vio con buenos ojos esa posibilidad y remarcó que “en ningún país del mundo han propuesto un regreso a las actividades escolares en espacios públicos sino que todos lo han proyectado dentro de la escuela”.
A pesar que solo quedan dos meses y medio de ciclo lectivo, el funcionario señaló que continúa trabajando con algunas provincias para proyectar el regreso a clases antes de fin de año, como San Luis y algunos departamentos de Chaco, siempre y cuando la realidad epidemiológica lo permita.
“Todos tenemos que priorizar el cuidado de la salud. Todos reconocemos que el impacto educativo y subjetivo de la pandemia es profundo en nuestros estudiantes. También somos conscientes que la región metropolitana sigue teniendo un nivel de circulación muy importante más allá de que mejoraron los indicadores de la Ciudad y su gobierno tiene una mirada optimista”, aseveró.
Con respecto a qué medidas se tomarán con esos 6500 alumnos porteños que abandonaron sus estudios en medio de la pandemia por falta de equipos y acceso a Internet, Trotta aclaró que ya tiene listas las computadoras para ser entregadas. “Como sabemos que la conectividad no resuelve la problemática, la complementamos con un acuerdo con la UBA para que trabajadores sociales acompañen a estos chicos”, enfatizó el ministro al ser entrevistado en la radio Futurock.
Además, descartó que los estudiantes tengan clases durante el mes de enero para compensar lo que no pudieron aprender durante el año pero aclaró que hay otros planes para los que están cursando el último año del secundario.
“Hemos planteado la extensión del ciclo lectivo para los chicos que cursen el último año del secundario hasta el 30 de abril para poder tener una propuesta presencial que permita darle un cierre de la educación obligatoria articulando con el nivel universitario”, precisó el ministro, quien confió en que esa cursada extra también pueda hacerse en algunas universidades.
El motivo es que las escuelas no tienen la capacidad edilicia para albergar a los que están terminando el quinto o sexto y a los que estarán empezando en 2021. “Por eso, apostamos a que las universidades puedan resolver esto con unos acuerdos que se están llevando a cabo”, indicó Trotta.
Actualmente, las únicas provincias que hoy tienen clases presenciales son La Pampa y Formosa; mientras que Catamarca, San Juan y Santiago del Estero tuvieron que retroceder porque hubo un cambio en la situación epidemiológica y se dispararon los contagios.
Fuente: InfoBae