Carlos Pellegrini. Una localidad ubicada en el corazón del Departamento San Martín, recibió un baldazo de agua fría el pasado martes con 16 nuevos casos positivos de coronavirus. Para una localidad de 7000 habitantes, el golpe a nivel salud fue grande.
Tras la cuarentena férrea de la primera etapa de la pandemia, la sociedad lentamente se fue relajando y era lógico. Pero un par de fiestas clandestinas desencadenó en una línea de contagios que encendió las alarmas.
“Todos los contagios se dieron en reuniones sociales”, aseveró el Dr. Nicolás Lépore, director del SAMCo local y agregó: “Lo del martes golpea, sacude y te da un baldazo de agua fría. Nos ubica en dónde estamos parados. Nos movimos rápido. El cambio de Fase nos ayudó. Estábamos trabajando a ciegas porque sabíamos que teníamos muchos contactos estrechos”.
Lépore señaló que “la gente niega síntomas. Aparecen casos y van a aparecer más. Tenemos 87 hisopados a la espera. El dato es alarmante. El porcentaje de hisopados que dan positivos es alto. Nosotros estamos trabajando ordenados. Los números muestran una cosa, pero nos estamos manejando con muchos cuidados y con la tranquilidad que hay que tener en estos casos. Tenemos disponibilidad de camas porque los positivos están bien y pasándola en su domicilio”.
Igualmente, la localidad se prepara para otra cifra que podría ser récord. El lunes, se instaló en Carlos Pellegrini el camión sanitario del programa DetectAr y se hicieron 87 hisopados, que aún están al aguardo sus resultados.
El SAMCo local
El SAMCo de la localidad no tiene terapia intensiva ni terapia intermedia. Tampoco goza de respiradores. Sin embargo, se hicieron tareas para el coronavirus en el nosocomio que incluyen un ala destinada para los casos positivos, sospechosos y con problemas respiratorios. Una parte del hospital está aislada con 8 camas disponibles, oxígeno central y la posibilidad de agregar 2 camas más. “Estamos trabajando en conjunto con los directores de los SAMCos de San Jorge y El Trébol, que nos dan una gran mano”. Actualmente hay 3 camas ocupadas con 1 positivo y 2 a la espera de hisopado. “Tuvimos también un derivado a San Jorge por falta de oxigenación en sangre”.
El inicio de los casos en esta localidad fue por un cumpleaños y una fiesta clandestina en un campo. Eso desencadenó que hubiera jóvenes contagiados que luego tuvieron nexo con sus familiares. Lépore dijo: “Le estamos poniendo las fuerzas, pero a veces te tira abajo por el gran esfuerzo que hace uno. Todos estamos trabajando mucho, desde el SAMCo y de la Comuna para que 15 minutos de estupidez tire todo por la borda”.
Y añadió: “Apelamos a la sociedad para que se cuiden el doble. Es fundamental la conciencia social. No nos queda otra. Tenemos déficit en los sistemas de salud y sin entrar en polémica, el coronavirus hizo tambalear a los mejores sistemas de salud del mundo. En estos días la gente empezó a colaborar, aunque sabemos que nos aparecerán muchos casos por contactos directos”.