Las profesionales del Área Municipal de la Mujeres comenzaron a capacitar sobre género y violencia de género, a las distintas esferas del Estado local, en el marco de la Ley Micaela.
Cerca del mediodía del jueves, en el Concejo Municipal, los seis ediles iniciaron dichas capacitaciones que estuvieron a cargo las trabajadoras sociales Camila Fernández y Evangelina Aimetta y las psicólogas Agustina Lépore y Cecilia Sbrascini.
Tras la primera charla introductoria, que continuará tanto en el Recinto como en el Municipio para el Gabinete político y el personal; Fernández y Aimetta contaron la experiencia y profundizaron sobre la temática tratada.
“Estamos muy contentas porque fue muy productivo y la verdad que el intercambio fue muy bueno. La Ley Micaela establece la capacitación obligatoria de las personas que trabajan en los poderes del Estado, tanto en el Ejecutivo, Judicial y Legislativo; en género y violencia de género”, manifestó Camila, mostrando su alegría por el inicio de la jornada y relatando de que se trata.
“Tiempo atrás, Jesica Ledesma presentó una ordenanza para adherir a esa Ley Nacional y establecer la capacitación obligatoria en la ciudad. Junto con el resto del equipo llevamos a cabo estas capacitaciones”, agregó.
Por su parte, Aimetta profundizó en los conocimientos que fueron transmitidos: “Se estuvo hablando de los conceptos que atraviesan el marco legal que está vigente y que tiene que ver con garantizar el acceso a los derechos de todas las mujeres y el reconocimiento de las identidades sexuales. Conceptos que tienen que ver con el sexo, con el género, el patriarcado. De acuerdo a lo que estuvimos trabajando, es el patriarcado el que reproduce relaciones asimétricas de poder y además está en la base de los diferentes tipos de violencias que padecen las mujeres”.
La trabajadora social hizo hincapié en la necesidad de generar este tipo de capacitaciones para entender que todos aquellos agentes del Estado tienen el deber y la responsabilidad de hacer cumplir con aquellas políticas públicas o proyectos de ley que tengan en cuentan la mirada y la perspectiva de género. “Es un deber, un compromiso y está ordenado legalmente”, afirmó.
Violencias
A la hora de hablar de violencias, Fernández detalló que “la violencia de género no es solamente el golpe, que es lo que se puede ver u observar en el cuerpo de las mujeres; existen micromachismos y existen diferentes violencias” que atraviesan al género y que muchas veces son reproducidas en las otras porque están totalmente naturalizado. ´”Decirle a una mujer que está manejando que vaya a lavar los platos es violencia y está muy naturalizado”, graficó.
“La idea de Ley Micaela es poder desnaturalizarlo y deconstruir esas prácticas que se llaman micro machismos. Esos también generan desigualdad y discriminación. La capacitación implica poder entender qué es la perspectiva de género. Y ni más ni menos, una forma de mirar las realidades distintas a la que normalmente estamos acostumbradas”, sentenció.
“El objetivo en realidad es cambiar la mirada, tener una mirada más inclusiva, no violenta, en donde se puedan deconstruir el machismo, la misoginia y las actitudes patriarcales. Hay que construir nuevas miradas que tengan que ver con la igualdad y la equidad entre varones y mujeres. Entre todas las personas”, ahondó sobre la igualdad y equidad que busca traer la ley.
Ley Micaela
Para contextualizar y seguir desarrollando el tema, Camila Fernández rememoró: “La ley tiene que ver con el femicidio de Micaela García, militante de los DD.HH. y el feminismo, quien fue secuestrada, violada y asesinada por Sebastián Warner, que en el 2010 había sido detenido y acusado por dos violaciones. Fue condenando a nueve años de prisión y en el 2016 salió con libertad condicional. En abril de 2017 secuestra, viola y asesina a Micaela”.
“Ante esto, el movimiento feminista, lo que vienen a plantear es que perspectiva tiene la justicia y el estado, cuando lo que hace es victimizar a las mujeres y dar una prisión domiciliaria a una persona que había sido condenada por abuso”, expreso con dolor por el accionar de la justicia.
Aimetta, en este sentido expuso que estas cuestiones derivan de un sistema patriarcal. “Ahí se ve la mirada patriarcal de la que hablamos y que atraviesa a todas las instituciones, tanto sea en la parte educativa, a las familiares, al mercado laboral y también a la justicia. Tenemos que cambiar la mirada de la justicia y de todos los operadores del estado para poder garantizar los derechos de las mujeres y las identidades diversas”, selló.