En medio del aislamiento social por la pandemia del COVID19, el Ministerio de Educación de la provincia de Santa Fe, designó a Marisa Iturbide como nueva delegada de la Región VIII de Educación, nombramiento que se venía demorando desde hace unos meses por la cuarentena. La misma, reemplaza el lugar que ocupaba Ivana Pacce.
Con una extensa trayectoria como docente en San Jorge, asumió su cargo el pasado jueves 28 de mayo. “La delegación no estuvo acéfala. Toda la organización del servicio alimentario y pedagógico se hacía a través de supervisores”, aclaró la flamante funcionaria en diálogo con InfoSastre.
La ex directora de la Escuela N° 926 “Pablo A. Pizzurno” destacó el trabajo con la secretaria de Gestión Territorial Educativa, Rosario Cristiani, junto con las subsecretarías, los senadores de los departamentos más la incorporación de los presidentes comunales e intendentes. “El mensaje es el de la mirada macro, de observar las cuestiones que se vinieron preparando desde el inicio de la pandemia. En un primer momento, la organización de los servicios alimentarios, al mismo tiempo la conservación del vínculo pedagógico”, señaló.
En ese marco Iturbide afirmó que están ingresando a una nueva etapa en la cual se está trabajando con los docentes en la plataforma y el blog del Ministerio de Educación en diferentes jornadas de capacitación. “Próximamente van a comenzar otras jornadas para preparar la vuelta a la escuela sin fecha que estará condicionada por cómo continúe la situación epidemiológicos. Será un retornó diferente. Por eso se está planificando cuidadosamente, tratando de prever los recursos que se van a necesitar, las formas de volver, cómo y cuándo”, explicó.
Si bien aún no está especificado los detalles del regreso a las aulas, la delegada regional indicó que se buscará focalizar en aquellos hitos de la educación obligatoria más comprometidos que pueden ser los primeros grados con alfabetización inicial, séptimo grado, los alumnos de primero y quinto año, una situación que preocupa a las autoridades. “Por sus características de aislamiento y con pocos alumnos, serían las escuelas rurales las primeras en volver a las clases presenciales”, estimó.
Consultada por el vínculo pedagógico durante los más de 70 días de confinamiento, la ex supervisora de la sección “A” indicó que sorprendió muchísimo la planificación y la organización de una logística que tenía cada escuela, ya sea en papel, por internet o what app. “Todas las escuelas han buscado las formas de acercarse a sus alumnos en el formato que sea. A aquellos chicos a los que no pudieron llegar con todo, son los más visibilizados, y son los que estamos pensando en cómo vamos a responder el día que vuelvan”, remarcó.
Asimismo, recordó la entrega de los cuadernillos de nación y provincia para el nivel inicial, primario y secundario y destacó la labor de las familias que en su mayoría han tratado de estar presente ayudando a sus hijos.
Por otra parte, la docente que se inició en la Escuela Especial N° 2043, se refirió a la impronta con la que pretende consolidar su gestión más allá de los lineamientos de la cartera educativa. “La gestión en una delegación es más amplia y más comprometida con más responsabilidades. Junto a la coordinadora pedagógica de la región, la profesora Fabiana Malandra y los supervisores aspiramos lograr un equipo basado en la confianza y el respeto, revalorizando a los docentes, para que se sientan amparados, escuchados y respetados. También es importante escuchar las voces de niños y jóvenes, en una idea de inclusión y de nuevas oportunidades”, afirmó.
Y añadió: “este año vamos a necesitar mucha observación a nuestros alumnos y volver a darles una oportunidad, porque este 2020, no es un año común”.
La flamante delegada de la Región VIII de Educación aseguró que este año no es un año perdido. “Yo creo que es un año en el que se aprende de manera diferente, y que aquellos niños que tienen dificultades, se han detectado prontamente y se está trabajando para darle respuesta. Probablemente van a necesitar refuerzos que la presencialidad lo va a lograr. Y aquellos alumnos que pueden transitar las aulas a su ritmo lo podrán seguir haciendo”, reconoció.
Por último, Iturbide se mostró convencida que una vez que se acabe con esta pandemia, dejará una enseñanza. “Yo espero que cuando termine todo y estemos el año que viene transitando normalmente las calles y las escuelas, no nos olvidemos de lo que pasó. Una de las enseñanzas va por el lado de lo pedagógico, de lo afectivo y lo humano. Hoy el uso de las estrategias virtuales que están poniendo en práctica los docentes, con todas las dificultades que se están observando, no pueden dejar de mantenerlas dentro de la presencialidad”, subrayó y recalcó que “ese acercamiento que tuvimos que suspender por la cuarentena, nos sirva para valorarnos como seres humanos, como docentes y como familia”. “Eso es algo que no tendríamos que olvidar”, concluyó.
Fuente: Infosastre.com.ar
