La producción industrial en Santa Fe volvió a caer en el mes de julio (aunque leve, fue de -0,3% interanual) y en los primeros siete meses del año se computa una caída de -8,9% con respecto a igual período del año pasado. El desplome implica una pérdida de más de ocho mil empleos en un año en la provincia, donde ya cerraron 300 empresas.
De acuerdo al Instituto de Investigaciones Económicas de la Federación Industrial (FISFE), en julio de 2019 y por décimo cuarto mes consecutivo, la industria santafesina mostró menor nivel de actividad, a pesar de que se compara con un periodo de baja producción.
La caída de este mes fue menor al inicio del año (incluso en junio fue de 2,1% la interanual). Esa moderación de la baja se fundamenta en la importante recuperación de la actividad en el complejo soja. Pero el 68% de las ramas industriales con desarrollo en la provincia de Santa Fe registraron en julio de 2019 menor nivel de actividad frente al mismo mes del año anterior (ver más abajo los rubros).
Víctor Sarmiento, presidente de FISFE, analizó: «Lamentablemente no se recupera el mercado interno. La caída de la actividad industrial en Santa Fe es del 9% en los últimos 7 meses, respecto del mismo período de 2018. Nos duelen estos índices pero no nos sorprenden».
«Estos últimos 15 meses de caída de la actividad implican una detracción del mercado salarial», dijo el titular de los industriales.
El informe de FISFE añadió que «el total de asalariados en el sector privado en Santa Fe se ubicó en junio -1,6% por debajo de 2018, equivalente a una pérdida de 8,3 mil puestos de trabajo».
Eso implica, además, 300 empresas cerradas en la provincia de Santa Fe y otras 330 con procedimiento preventivo de crisis, dijo Sarmiento.
Sarmiento aclaró que «el 80% de lo que se consume en la Argentina es comprado por los argentinos» y por lo tanto «no hay otra alternativa que un cambio de modelo que incluya a los 45 millones de habitantes».
La situación puede agravarse
Para Claudio Mossuz, tesorero de FISFE, señaló que «asistimos a un nuevo y casi naturalizado descenso de la producción industrial de Santa Fe».
«Esto es una foto de antes del caos económico y financiero que aconteció después de las Paso», advirtió el además dirigente de AIM y apuntó que la situación «será más grave de lo que estamos comentado ya con naturalidad».
«Este modelo ha excluido la industria desde el inicio. Fue un gran error hacer prevalecer el sector financiero por sobre el productivo y ha descuidado lo único que puede generar desarrollo genuino», dijo Mossuz.
La caída por rubro
Entre las veinte actividades de mayor contribución al producto industrial santafesino, en julio de 2019 se hallaron los siguientes resultados interanuales: vehículos automotores (-82,1%), industria siderúrgica (-25,6%), otra maquinaria de uso especial (-18,7%), autopartes (-14,5%), prendas de vestir (-10,8%), productos de metal y servicios trabajo metales (-10,5%), carrocerías y remolques (-9,8%), productos lácteos (-6,4%), fiambres y embutidos (-5,5%) y maquinaria de uso general (-5,4%).
En cambio, Carne vacuna (+8,2%) y molienda de oleaginosas (+33,2%) sobresalen entre los sectores con resultados positivos.
Fuente: Radio 2/Rosario3