Se conmemora un nuevo aniversario del “Paso a la inmortalidad del Gran José de San Martín”. 168 años de aquel 17 de agosto de 1850, cuando a las tres de la tarde, en el viejo continente, en su residencia de Francia, nuestro libertador, el de Chile y Perú, se convirtió indudablemente en historia y en eternidad.
Lejos de la patria que liberó e intentó forjar con pensamientos, obras y acciones, el General recién pudo volver a su tierra 30 años después, el 28 de mayo de 1880.
Desde ese momento y hasta la actualidad, su corazón descansa en argentina y cada 17 de agosto se le rinde homenaje a su inmenso recuerdo.
De esta manera, en un sencillo acto, autoridades locales hicieron la entrega de una ofrenda floral en el busto del General, ubicado en la plaza que lleva su nombre. Previamente, el párroco Marcelo Blanche realizó una bendición.
En la misma, estuvieron presentes el director de Cultura y Relaciones Institucionales, Jorge Meynet; el secretario de Obras, Servicios Públicos y Gestión Ambiental, Gilberto Bonelli; el coordinador de Comercio e Industria, Mario Gambetta; la concejal Jesica Ledesma y vecinos de la ciudad.
