La soja alcanzó valores históricos y coloca al productor en una situación de expectativa e incertidumbre a la vez. Si bien era de esperar una mejora en la cotización, producto de una notable caída en los volúmenes proyectados para la actual campaña, primero por la falta de agua y ahora, por los daños recientes que ha causado el exceso de lluvias en los últimos días, pocos imaginaron que la soja alcanzaría los $8.000 la tonelada y con estimaciones a futuro que superarían los $9.000.
En dicho contexto el productor analiza el presente económico, el cual obviamente difiere de cada caso en particular, aunque en líneas generales, a pesar del buen precio, la tendencia es mantenerse posicionado en granos: “La escalada de precios de la última semana es como que tomó de sorpresa a todos y la explicación viene de la mano de dos motivos: uno es el aumento del dólar que se traslada al precio de los granos y el otro factor, es que a nivel país, la cosecha de soja ha sido muy pobre; o sea, a la mala cosecha que se venía dando por la falta de agua, ahora se le suma notorios daños en lo que queda por levantar, que no es una superficie menor y eso hace que la disponibilidad proyectada no sea la esperada”, comenzó explicando el Gerente de la Cooperativa Agrícola Ganadera de El Trébol Limitada, Daniel Aresse.
La semana comenzó con una acelerada escalada de la soja que llegó a los $8.000 y al respecto, Aresse puntualizó: “Este tipo de saltos marcados y progresivos en el precio suelen darse cuando aumenta el dólar y muestra de esto, es que también repercute en los precios de maíz y trigo, el cual por ejemplo pasó de $4.500 a $6.200”.
Perspectivas
A la hora de evaluar qué es lo que puede llegar a pasar a corto/mediano plazo, el Gerente de la Cooperativa sostuvo que: “Es muy difícil proyectar con exactitud qué es lo que puede pasar. A nuestro entender los precios en valor dólar deberían mantenerse debido a que existe escases de granos y dicha situación recién podrá comenzar a revertirse de cara a la próxima cosecha de soja. Luego empiezan a jugar las proyecciones de siembra de EEUU y también puede incidir en el mercado, pero la realidad es que la falta de soja en nuestro país se va a sentir y lo mismo está pasando con el trigo, donde existe una importante demanda y los molinos salen a ofertar por encima del valor que venía manteniendo y el maíz no es la excepción”.
Comercialización
Indudablemente los valores del mercado generan incertidumbre en los productores: “En la medida que la soja iba aumentando, el productor vendía lo justo y necesario para cubrir sus gastos, pero en líneas generales la gente prefiere esperar y ver cómo se termina de desarrollar este presente económico”, indicó Aresse sobre el comportamiento que demuestra el productor en torno a la comercialización de granos y agregó: “Hoy la realidad es que vender por vender no sirve y es por eso que el productor se mantiene posicionado en granos”, finalizó.
