Por Melisa Barrios
El color violeta, símbolo de la lucha contra la violencia patriarcal hacia las mujeres, se vio opacado y corrido de lugar por el amarillo, el rojo, el celeste, el azul y otros tantos tonos más, que representan la política y que con crudeza mostraron que estamos en un año electoral.
Hubo caras que en la última marcha, en la que participaron no más de 20 personas, no estuvieron y otros que estuvieron ausentes.
Pero no solo desde el Estado en todas sus formas, y desde las distintas líneas políticas partidarias, sino una comunidad ausente. La sociedad no concurrió a la marcha en masividad, fue sólo un grupo, más numeroso que en otras ocasiones pero siguen siendo pocas, a pesar que en El Trébol, en el último año hubo dos femicidios. Dos mujeres muertas a manos de un hombre.
El “Ni una menos” no es un mero hashtag que se publica en las redes sociales con la foto del momento y al instante, marcando una presencia. Va más allá. Es en un concepto cargado de dolor, de tristeza, de violencia, de impotencia y también de lucha.
Esa lucha que miles de mujeres empoderadas supo conseguir en la calle, poniendo el cuerpo y representando a todas, a las que se sienten parte, a las que no, a las que quieren pero no pueden y principalmente, a las que ya no están, a esas mujeres, niñas, hermanas, mamás, tías, abuelas, sobrinas, amigas, que un día un hombre puso fin a su vida.
Con sencillez y acostumbradas a la lucha, ese grupo perteneciente al matriarcado local estuvo presente y puso palabras y conceptos a la lucha. Esas mujeres que todos los días del año trabajan pensando en la otra, que enfrentan situaciones dolorosas, que acompañan a las víctimas, que les dan valor para cortar con sus situaciones. Esas maravillosas mujeres que no juzgan y que entienden con empatía lo que es el dolor.
Esas mujeres volvieron a estar presentes y volvieron a decir si a la marcha, si a la igualdad de género, si a la lucha y un NO ROTUNDO al sistema misógino patriarcal que somete a las mujeres.
Por ellas, esa marcha tuvo sentido. Para ellas el #NiUnaMenos es una prioridad impostergable e irrenunciable. Gracias por luchar por todas las mujeres. Son un verdadero baluarte de la sociedad y ojalá así lo entienda la comunidad.