Las piscinas climatizadas de la ciudad sufrieron la furia de las tormentas.
El jueves por la mañana, cuando a las 11 hs. un fuerte viento del sur con ráfagas de lluvia sorprendió a la ciudad, nadie presagiaba que sería tan violento.
La ciudadanía había vivido en la noche anterior una tormenta eléctrica dantesca y parecía que el meteoro ya había pasado.
Incluso la mañana había comenzado con vestigios de sol y con la paz post lluvias.
Pero nuevamente los vientos de ráfagas huracanadas azotaron la región. Desde carteles y árboles arrancados de raíz hasta gajos rotos y toldos removidos se vieron por las calles.
De manera privada, muchas viviendas sufrieron roturas de vidrios y voladura de tejas. Incluso un galpón propiedad de la familia Betatti se desplomó por calle Juan Francisco Seguí, entre Córdoba y Entre Ríos.
Destrozos en los clubes
Pero los que también sufrieron la furia del clima fueron los natatorios climatizados de El Expreso y Trebolense.
En el Club «Verde» de El Trébol, la estructura se desplomó dentro del natatorio, incluso con el andamiaje de metal y el sistema lumínico.
Primero se soltó una lona, el viento entró embolsando la carpa y produjo los grandes destrozos y el derrumbe de la estructura. El viento también voló los caños del gas y las lámparas de luz cayeron al agua.
Desde El Expreso decidieron dejar cerrada la temporada de invierno. De inmediato se comenzará a trabajar para poder comenzar con la temporada estival, que iba a dar inicio en los primeros días de diciembre, pero dadas las circuntancias, no hay una fecha cierta.
Por el lado de Trebolense, con el corte prolongado de energía se desplomó el Domo inflable, produciendo grietas en las lonas y roturas en los tabiques de los vestuarios interiores.
Ya en tormentas anteriores la estructura había sufrido este tipo de daños.
«Decidimos desinflar el Domo totalmente y quitarlo. Ya no lo inflaremos hasta el año que viene y si hay alguien que quiere venir a nadar, el agua seguirá climatizada, aunque ya nos ponemos a pensar en el verano. De alguna manera, la temporada invernal de pileta se terminó», señaló a este medio Guillermo Caffaratti desde el club «Celeste».