– Una de las causas obedece a una faltante de entre 400.000 y 450.000 terneros que se perdieron por las inundaciones de 2014 en Buenos Aires.
«Los motivos que permiten vislumbrar este panorama son básicamente dos. Por un lado se descuenta un faltante de entre 400.000 y 450.000 terneros que se perdieron por las inundaciones de 2014 en Buenos Aires. Por el otro, se insinúa el inicio de un ciclo de retención de hacienda por parte de los productores, que responde a la promesa de mejores rentabilidades en el sector y a la fuerte caída de los precios agrícolas. Eso explicaría por qué la faena de hembras se redujo a 43% del total, casi dos puntos menos que igual época del año pasado. Habrá disminución de oferta y generará aumentos de precios en el segundo semestre del año, en la hacienda en pie y en la carne en el mostrador», evaluó Miguel Schiariti, titular de CICCRA.
Hasta hora, transcurrido el primer trimestre de 2015, el mercado ganadero muestra bastante estabilidad. El kilo vivo en el Mercado de Liniers promedió al cierre de marzo los 15,35 pesos. Respecto de igual periodo del año anterior, la variación fue de 20,9%, por debajo de la inflación general. Al consumidor, en tanto, el precio promedio de la carne en enero creció 0,4%, en febrero la suba fue de 1,3% mensual y en marzo tocó un máximo de 3%», precisó CICCRA. En relación a marzo de 2014 los aumentos rondan un 23,5%. Es decir, el alimento muestra cierto atrasado relativo respecto de otros productos de la canasta.
A pesar de ello, y de que la oferta interanual de carne aumentó 5%, en marzo el consumo per cápita de carne se ubicó en 59,3 kilos por año, con un retroceso de 5,2% anual respecto de igual mes de 2014. Este dato, sin más, refleja una caída del poder adquisitivo de la población.
