– Volvieron las lagunas, los caminos intransitables y las napas al límite de la superficie en los campos del sur santafesino y el noreste bonaerense. Luego de superar los 100 mm en sólo tres días la siembra de soja espera a que drenen los excesos. En la franja oeste de la región, las labores comenzarían en los sectores altos el fin de semana. Los trigos están en sus últimos días de llenado y el área bajo la condición «regular» ascendió de 5 a 11% del total en una semana. El daño por calor bajaría el rinde regional a 36 qq/ha.
Se mueve muy lentamente la siembra de soja en la región núcleo tras el temporal de lluvia y viento. Del 15% sembrado hace una semana sólo se sumó un 2% más antes de las lluvias y la actividad retornaría en el noroeste de la región núcleo, comenzando por el este cordobés y el centro sur santafesino. Esta área fue la menos afectada por las lluvias. Aquí los acumulados estuvieron en el rango de los 40 a 80 mm, caracterizándose por lluvias constantes, de menor intensidad y efectivas para empezar con la siembra de la oleaginosa. Los pronósticos que anuncian condiciones estables impulsan a reanudar las labores de siembra en los próximos días. Muy distinta es la situación en el noreste y sur santafesino donde los acumulados del último fin de semana dejaron más de 100 mm. Si tenemos en cuenta las precipitaciones de los últimos cinco días, en Rojas los acumulados superan los 200 mm
Las expectativas de rindes de trigo en la región retrocedieron, dejando el promedio en 36 qq/ha, 1 a 2 qq/ha menos debido a las altas temperaturas registradas la semana previa. Las lluvias calmaron la situación de estrés térmico pero no llegaron a tiempo para evitar el daño por calor. El ciclo del cultivo se aceleró, se acortó la fase de llenado y aumentó la posibilidad de generar granos chuzo, lo que implicaría una baja en el peso hectolítrico. El este cordobés es el área más afectada ya que se estima una merma del 10% en el rinde, siendo que se esperaba de 36 a 40 qq/ha en promedio. En la región el cereal transita el estadio de llenado de granos en un 72% de la superficie y la calificación «regular» ascendió de 5 a 11% en una semana. Sin embargo, un 56% de los cuadros sigue manteniendo muy buen estado.