– A su vez, en el año acumula una disminución de 26% desde los u$s 482,27 la tonelada, cifra en donde había cerrado el 31 de diciembre de 2013. Se estima que con los precios actuales (que se mantendrían, según los contratos negociados en Chicago de mayo 2015, que es cuando finaliza la cosecha de la oleaginosa), ingresarían al país u$s 3.200 millones menos que este año por las exportaciones de granos y sus derivados.
«El mercado de granos sigue perforando pisos insospechados meses atrás», sostuvo el analista Ricardo Baccarin. Es que los altos precios precios que se registraron en abril y mayo de este año (la soja llegó a los u$s 562 la tonelada a fines de abril) incentivó a los productores norteamericanos a sembrar más soja, por lo que llegaría a la cosecha récord de 106,5 millones de tonelada. Esta cantidad se suma a la producción récord en Brasil y la Argentina, de 94 y 55 millones de toneladas, respectivamente. También cayeron ayer el maíz, un 1% a u$s 133,16; y el trigo, un 2,2% a u$s 179,50 .
Con los precios en mínimos de 4 años, los productores esperan un cambio de escenario para liquidar lo que aún conservan. Se estima que aún retienen 21 millones de toneladas de soja. Según una estimación del IERAL, de la Fundación Mediterránea, hasta fines de agosto se llevaba vendido solo 51% de la producción estimada de soja. Históricamente, en este mes del año las ventas ascendían a 69,4% del total. Es decir que la liquidación de esta campaña viene atrasada en 18,4 puntos porcentuales. «La demora en las ventas se relaciona con el proceso inflacionario y la expectativa devaluatoria que dominan actualmente a la economía argentina», señaló el economista Juan Manuel Garzón, del IERAL.
Se calcula que este año los dólares que ingresarán a la economía por las exportaciones de granos y sus derivados será de u$s 30.000 millones, un poco por debajo del máximo de 2011. A su vez, el precio de la soja para el contrato de mayo de 2015 en Chicago cerró ayer en u$s 365,33 la tonelada, sólo un poco por arriba del más cercano negociado, que terminó ayer en los u$s 357. Suponiendo que la campaña agrícola 2014-2015 sea similar en cantidades cosechadas, los agrodólares que entrarían a la Argentina se verían reducidos en u$s 3.200 millones, hasta u$s 26.800 millones.