– Según análisis privados la superficie crecería entre un 10 y un 12 % para el cultivo del cereal. El principal incentivo son los precios. A poco más de un mes de darse el inicio de la campaña de granos finos, el trigo podría recuperar el terreno perdido en los últimos años. Así parecen indicarlo los informes privados que mencionan una suba en la superficie implantada que podría elevarse entre un 5 y un 12% sobre la siembra de 2013.
Hay dos cambios sustanciales para que el cereal recupere superficie este año. La primera es climática, luego de varias campañas con escasez de agua en momentos críticos del cultivo. La segunda, pasa por los buenos precios tanto del mercado interno como el externo.
Pero al mismo tiempo, el Ministerio de Agricultura también evalúa medidas que ayuden a estimular un poco más la mayor siembra de trigo, según pudo saber El Enfiteuta. Cuando asumió Carlos Casamiquela al frente de la cartera agropecuaria se comprometió a definir herramientas que impulsen una mayor siembra del cereal.
Si bien las fuentes consultadas no dieron mayores detalles, hay razones para pensar que se defina algún tipo de política con medidas tendientes a fomentar la cobertura de riesgo que garanticen al mismo tiempo el mercado interno a precios previsibles.
Entre tanto, los analistas privados creen que la superficie implantada con el cereal podría crecer hasta un 12%, y que rondaría los 4 millones de hectáreas.
El gerente técnico de Nidera, Guillermo Alonso, indicó a la agencia Télam que «llovió muy bien desde el 15 de enero para adelante en todo el país», y estimó que «sin lugar a dudas hace que el productor se vea tentado a sembrar trigo».
«Somos optimistas, va a haber un crecimiento de área, sin dudas, de 10 a 12 por ciento», afirmó Alonso, quien puntualizó que «las condiciones de cultivo son favorables». El analista subrayó que «empezar con los suelos cargados con agua es tener parte de la carrera y a adentro».
Por su parte, el vicepresidente de Panagrícola, Ricardo Baccarín, afirmó que «va a haber un incremento del área sembrada», porque «los precios son buenos y las perspectivas en el mercado internacional también son buenas».
«Hay un entusiasmo entre los productores mayor al del año pasado, porque los precios internos y los internacionales están en un nivel que empujan a que se incremente el área cultivada», remarcó Baccarín.
El cultivo, cuya área fue de 3,65 millones de hectáreas el año pasado, ahora podría superar los 4 millones. Al respecto, el presidente de la Asociación Argentina de Trigo (Argentrigo), Matías Ferreccio, sostuvo que «es muy preliminar, pero sobre la base de estimaciones y encuestas a productores, se proyectan 4 millones de hectáreas».
Del mismo modo, Gustavo López, consultor de Agritrend, consideró que esa cifra es «un piso». En tanto, el economista Carlos Seggiaro recomendó la siembra de trigo con vistas a la campaña fina. «Tengo una visión optimista sobre el trigo que lo que fue la campaña pasada, y pienso que va a haber más trigo en el país porque habrá condiciones climáticas mejores», remarcó Seggiaro.
Seggiaro estimó que «el Gobierno va a flexibilizar parcialmente sus condiciones en términos de regulación, y va a volver a aparecer el precio pizarra y habrá condiciones relativamente normales para la compra y venta». El economista concluyó que «Mi recomendación para el productor es que siembre trigo».