Los restos de Priebke, varados en un aeropuerto militar – A una semana de su muerte, las autoridades no logran sepultar el cuerpo Hoy se cumplirá una semana de la muerte de Erich Priebke, criminal nazi fallecido el viernes pasado, a los 100 años. Pero, en lo que se ha convertido en un verdadero escándalo en Italia y en un virtual conflicto diplomático con Alemania, sus restos mortales seguían ayer en el caos, sin encontrar un lugar para el eterno descanso.
Luego de que, anteanoche, algunas versiones dijeron que su féretro había sido llevado a un lugar secreto, ayer se informó que seguía estando en un hangar del aeropuerto militar de Pratica di Mare, a la espera de una solución.
Ni Italia, ni Alemania, ni la Argentina, donde el ex capitán nazi vivió durante décadas, se mostraban dispuestos a resolver el problema.
En un episodio grotesco y cada vez más bochornoso para las autoridades italianas -que se cree que deberían haber tomado cartas en el asunto enseguida, en forma reservada, para evitar así un papelón mundial-, el abogado del ex oficial de las SS, Paolo Giachini, seguía siendo el gran protagonista.
«Los restos de Priebke han sido secuestrados, sus familiares piensan denunciar este hecho, quieren saber dónde están y que les devuelvan el cuerpo», clamó por la mañana, al explicar que un hijo de Priebke le había dado mandato para hacer el reclamo correspondiente.
El letrado también contó que, en nombre de los familiares, había hablado con el cónsul alemán, y que le había dicho que existían posibilidades de un traslado del féretro al país natal de su cliente, si se resolvían cuestiones administrativas complejas.
«También hay una hipótesis interesante en Italia, donde un estudio legal ofreció su disponibilidad», reveló Giachini, que más tarde difundió un videotestamento de Priebke que generó aún más controversia.
«La ejecución fue terrible, pero era imposible decir que no», dice en la filmación, que se desconoce cuándo fue realizada, el ex oficial nazi, condenado en 1998 a prisión perpetua por su rol en la masacre de las Fosas Ardeatinas. Esta ocurrió el 24 de marzo de 1944, cuando 335 italianos, de los cuales eran 75 judíos, fueron fusilados en represalia por un atentado partisano ocurrido el día anterior.
El video, en el cual Priebke aparece hablando perfecto italiano con acento alemán y es entrevistado por Giachini, recuerda que el ex oficial nazi durante el juicio en su contra, en 1996, declaró que «la orden de participar a la acción fue una gran tragedia íntima».
En medio de la polémica, mientras la prefectura de Roma decretó la prohibición de la sepultura de Priebke en el territorio de la capital y de la provincia, el giberno italiano desmintió la participación de los servicios secretos en el presunto traslado del féretro desde el aeropuerto de Pratica di Mare a un lugar ignoto, como se había denunciado.
La prefectura aclaró que había dispuesto «por motivos de orden público» que el cuerpo de Priebke fuera emplazado en el aeropuerto militar, por ser «un lugar seguro y controlado».
Otro golpe de escena fue que, más allá de las protestas y los incidentes del martes pasado en Albano Laziale, Priebke sí tuvo funeral. Así lo informó el vocero de Pierpaolo Petrucci, superior de los lefebvrianos de la Fraternidad San Pío X, que dijo que «Priebke murió como católico y arrepentido».
El pésimo manejo del caso provocó polémicas también en Alemania, donde el Suddeutsche Zeitung escribió que el país natal del «verdugo» de las Fosas Ardeatinas «tenía la obligación moral de recibir al criminal muerto y determinar que su tumba no pueda ser aprovechada para la propaganda nazi».
Fuente: Lanación.com.ar
