Fue ante unos 70 mil fieles

Papa: «Basta de guerras en familia» – Bergoglio pidió rezar «por aquellos con quienes estamos enojados». Y también denunció «la verdadera plaga» del trabajo infantil. El Papa Bergoglio se alarmó hoy por «tantas guerras» en el «pueblo de Dios». Y no se refirió específicamente a los conflicto armados, sino a las peleas y batallas de la vida diaria que dividen hasta a las familias.

«Miramos en los diarios o en las televisiones tantas guerras entre cristianos, dentro del pueblo de Dios, cuántas guerras en los barrios, en los puestos de trabajo, cuántas por envidias y celos, incluso en la misma familia, tantas guerras internas: pero nosotros tenemos que pedir al Señor que nos haga entender bien la ley del amor», advirtió Jorge Bergoglio.

Durante la audiencia general de los miércoles en plaza San Pedro, antes más de 70 mil presentes, Francisco arengó: «¡Qué bueno, que hermoso es amarse los unos a los otros como hermanos verdaderos, que bello es ésto!».

«Hagamos una cosa hoy -sugirió- quizás todos tenemos simpatías y no simpatías, y quizás tantos de nosotros estamos un poco enojados con alguien. Ahora digamos al Señor: estoy enojado con él o ella, yo ruego por él y por ella». «Oren por aquellos con quienes estamos enojados -agregó el ex arzobispo de Buenos Aires- es un buen paso en esta ley del amor, hagámoslo así».

En la misma audencia, el Papa argentino se refirió en duros términos contra el trabajo infantil. «Hay millones de menores, en su mayoría niñas pequeñas, que son víctimas de esta forma oculta de explotación que con frecuencia incluye abusos sexuales, malos tratos y discriminaciones», lamentó.

«Todos los niños deben poder jugar, estudiar, rezar y crecer en sus propias familias, en un entorno armonioso, de amor y de serenidad: es su derecho y es nuestro deber», sentenció en ocasión al Día Mundial contra el Trabajo Infantil.

Bergoglió advirtió que se trata de un «fenómeno lamentable en constante aumento», sobre todo en los países pobres, que afecta en particular a las niñas. Y deseó que «la comunidad internacional pueda tomar medidas cada vez más eficaces para combatir esta verdadera plaga». «¡Es una verdadera esclavitud!», exclamó.

Fuente: Clarin.com