Argentina aguantó un empate que la acercó a la clasificación – Puede asegurarse la llegada al Mundial en la próxima fecha. Aunque la Selección fue a Quito a buscar un triunfo, a 2.850 metros de altura consiguió un empate valioso que lo deja cada vez más cerca de Brasil 2014. El equipo de Alejandro Sabella, que arrancó sin Lionel Messi, ganaba por el gol de Sergio Agüero a los tres minutos, pero el local lo igualó en esa primera etapa por intermedio de Castillo. Sobre el final, se fue expulsado Javier Mascherano en un confuso episodio.
Argentina golpeó en el inicio. Al minuto, Angel Di María se desprendió de la marca, los volantes ecuatorianos lo ignoraron y el volante del Real Madrid disparó al arco. El arquero, ante un remate potente y complicado, dio rebote. Palacio, entonces, corrió a buscar la pelota, enganchó, Domínguez salió a taparlo y el árbitro cobró penal y amonestó al 1 del local. A los tres, y luego de varias protestas de los argentinos para que expulsara a Domínguez, el encargado de cambiar la pena máxima por gol fue Sergio Agüero, quien remato con un derechazo cruzado, al palo contrario al que se tiró el arquero.
El gol le permitió a Argentina dividir la posesión de la pelota pero no pudo resistir el vertiginoso ritmo que le impuso el local, cuyo mayor recurso mostrado en los primeros minutos fue sacar centros que recorrieran todo el ancho del área que defiende Sergio Romero. Y así, a los 16 minutos, una falta de Banega en el costado izquierdo del área terminó en el centro al área chica que Castillo, tras ganarle la espalda a Federico Fernández, que se quedó quieto, cabeceó para anotar el 1-1.
Si el gol de Argentina le había dado mayor confianza a la Selección, en Ecuador no se podía esperar otra cosa después del empate. Montero por la izquierda se hacía un festín con Peruzzi y cada pelota que llegaba a sus pies terminaba en un centro complicado para un estático Romero. En el otro área, mientras tanto, apenas alguna contra que no prosperaba y el recurso siempre utilizado (pero no por eso menos efectivo) del remate desde afuera del área de Di María, como a los 23 minutos cuando su tiro forzó la estirada de Domínguez para mandar la pelota al córner. Ese mismo recurso utilizó Agüero minutos más tarde, a los 30, pero en esa oportunidad el arquero sí contuvo su tiro.
A los 25 casi vuelve a golpear Ecuador por otra desatención de los defensores argentinos. Tras conseguir un córner, jugaron corto, Valencia recibió en el área y se dio el gusto de girar sin marca y probar el remate. Por ambos costados, tanto Valencia como Montero complicaban a los marcadores argentinos en esa defensa de cinco jugadores que paró Sabella. Como si fuera poco, en el medio tampoco hacía pie la Selección, con Banega muy errático y Mascherano demasiado retrasado para ayudar en la marca.
Antes del final de la primera etapa, la Selección intentó con una jugada preparada. La pelota voló desde el arco en los pies de Romero hasta el área, donde Agüero esperaba para rematar al arco en soledad. Sin embargo, Domínguez descubrió sus intenciones y sacó la pelota. Su rebote largó le quedó a Di María, cuyo tiro fue controlado con esfuerzo por el arquero. Ahora sí Argentina ya comenzaba a extrañar a Messi. Y su ingreso no tardó en producirse.
Claro que antes Argentina tuvo que sufrir. El arranque del segundo tiempo lo encontró dormido y con demasiada pasividad en defensa cuando Ecuador no paraba de atacar. Entonces, Sabella miró al banco, lo vio y confirmó las sospechas: el cambio de Messi por Agüero a los 15 minutos. Y en tres minutos, apenas, el crack del Barcelona tuvo dos chances. La primera tras una habilitación de Palacio en la que probó al arco y su remate dio en un rival, y un minuto después con un tiro libre que no encontró el cabezazo de ninguno de los grandotes de la Selección. A la imposibilidad de anotar, se le sumaba la amarilla a Garay, que así se quedaba afuera del próximo compromiso, contra Paraguay, como su compañero en la zaga central, Fernández, también amonestado en este partido.
El tramo final del partido encontró un mediocampo partido, con ambos equipos buscando el triunfo. Argentina con Messi cambió y a los 36 minutos la Pulga jugó la individual, puso un pie en el área y probó al arco. Su remate por TV se vio adentro, pero la pelota se fue desviada. Mientras tanto, enfrente Ecuador no se daba por vencido e intranquilizaba en cada ataque. El panorama empeoró cuando a los 41 minutos Mascherano pateó al conductor del carrito que lo llevaba afuera de la cancha para ser atendido y el árbitro lo expulsó, provocando la bronca del volante y el desconcierto de todo el equipo. En ese ambiente se desarrollaron los últimos minutos, con siete adicionados, y la última a favor del local, por un tiro libre infantil generado por Basanta. Y aunque todo Ecuador fue a cabecear, la posición adelantada de Caicedo anuló la acción y provocó el pitazo final, en un difícil partido en el que Argentina logró volverse con un punto importante de cara a la clasificación.
