Partido clave por el título y el descenso

La AFA ratificó que el clásico va de noche, pese a las quejas – River e Independiente jugarán el domingo a las 21.30 en Núñez para competir con el programa de Lanata. Podrían correr San Lorenzo-Argentinos al lunes. Es una rareza y casi un absurdo: el fútbol argentino vive días de tensión y de incertidumbre a consecuencia de los horarios. Por tercer fin de semana consecutivo, el Torneo Final terminará su domingo casi de medianoche porque el último partido de la jornada volverá a comenzar a las 21.30. Otra vez, el protagonista será River. En esta ocasión como local y frente a otro grande, Independiente. El contexto de partido decisivo (por el título y por la permanencia) lo ubica en la vieja consideración de «alto riesgo». Sin embargo, el tema de la seguridad parece ajeno al momento de las decisiones que se confirman en la sede de la AFA pero que nacen por imposición del Gobierno Nacional.

No es percepción, lo confesó al inicio de la medida el vicegobernador de la Provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, estricto hombre K : «La decisión de cambiar de horario los partidos es por rating y para competir contra un buen programa como el de Lanata».

La movida inicial, según cuenta el rating de los últimos dos domingos, no ofreció el éxito deseado para sus impulsores. Sin embargo, la búsqueda se reitera incluso a pesar de que las circunstancias -en términos de seguridad- resultan incluso más complejas. Hace poco menos de dos años, en el mismo Monumental en el que ahora se van a enfrentar River e Independiente, sucedió un descenso y un escándalo. Este domingo el Rey de Copas por primera vez en su historia se puede ir a la B. Con un agregado que no agrada: la noche cobijará ese momento. Es decir, lo que antes era un problema para los organismos de seguridad y obligaba a modificaciones ahora no es considerado. Sin embargo, los vecinos de la zona cercana al estadio, en Núñez y en el Barrio River , se dan cuenta de los riesgos, se quejan y tienen miedo de situaciones traumáticas como las del 26 de junio de 2011.

La mirada del Gobierno Nacional la brindó Mariotto otra vez. Dijo en declaraciones a El Cronista TV: «El horario de las 21.30 me parece bárbaro. Lanata o cualquier programa tiene el potencial que tiene; el ciudadano puede hacer el zapping que quiera. Es importante que haya buen zapping «. No se modifica la idea que ahora cumplirá oficialmente tres semanas. Se busca lo que se buscaba, más allá de las particularidades y de las consecuencias posibles. En el último partido nocturno (disputado también por River; ante Argentinos en el Diego Maradona de La Paternal) hubo una pelea entre hinchas visitantes y un apuñalado en la presunta disputa por la reventa de entradas.

Anoche, en la sede de la AFA, durante la reunión de Comité Ejecutivo, quedó claro que -más allá de quejas ocasionales- los dirigentes eligen no confrontar. En un principio, Boca, River, San Lorenzo y Estudiantes manifestaron su disidencia con la medida de jugar el domingo después de las 21. Boca se mantuvo en la postura, pero finalmente accedió. De todos modos, en el club que preside Daniel Angelici entienden que ahora están pagando facturas .

Ayer el titular de Independiente, Javier Cantero, comentó su impresión que es la de casi todos los dirigentes, al menos en público: «Nosotros tenemos firmado un contrato con la televisión y debemos respetarlo «. No es casualidad, ese rubro resulta el principal ingreso de los clubes. Otro dirigente de un equipo grande que participó de la reunión expresó, en off : «Estamos soportando muchas presiones del Gobierno. Hacemos todo lo que podemos. Vivimos situaciones muy difíciles».

No se trata sólo de un detalle el horario. El ex juez Mariano Bergés, miembro de la ONG Salvemos al Fútbol, le dijo a Clarín: «Independientemente de cuestiones políticas, es riesgoso un partido de estas características en horario nocturno. No hay que olvidarse que aquel partido de River contra Belgrano, en 2011, contó con tres mil policías y tuvieron que militarizar la zona para evitar problemas que luego sucedieron». Ahora, se estima un operativo similar al de un Superclásico, con entre 1.200 y 1.400 efectivos. Por motivos afines a los que contó Bergés, otra ONG, Fútbol en paz en Argentina, le pidió ayer a la Justicia de la Capital Federal que suspendiera la disputa del River-Independiente en horario nocturno y que el encuentro fuera reprogramado para la tarde (ver aparte). En simultáneo, la Legislatura porteña avanza en un proyecto para que los partidos que se jueguen en la Ciudad los sábados y los domingos no puedan programarse luego de las 20.30.

La cuestión de los horarios involucró a otros dos personajes centrales: por un lado, el presidente de la AFA, Julio Grondona, y por el otro al vice de San Lorenzo, Marcelo Tinelli. El conductor televisivo se expresó a través de su Twitter: » Por favor a las autoridades que no nos cambien el día del partido con Arg. jrs. Queremos que se juegue el domingo «. Sabía que el cambio de día era una de las opciones que se manejaban desde el Gobierno. Más: desde el Comité de Seguridad aconsejaron que no se disputaran dos partidos en la Ciudad el domingo. Ayer, por eso, Grondona, Tinelli y el presidente Matías Lammens se reunieron en la casa de Don Julio en Puerto Madero. A la noche, en la calle Viamonte, no hubo variantes en el cronograma. Pero, según pudo averiguar Clarín, existe la posiblidad de que haya modificaciones en las próximas horas. Se busca evitar que (ante eventuales triunfos de Argentinos ante San Lorenzo y de Quilmes contra Arsenal) Independiente quede expuesto al descenso en la noche de Núñez. En definitiva, un alto riesgo que no se tiene en cuenta.

Fuente: Clarín.com