Mujica habló sobre el Papa

«Es como hablar con un amigo del barrio» – El presidente uruguayo se refirió a Francisco como un «un Papa singular». Por su parte, Jorge Bergoglio declaró estar contento de haberse encontrado con un «hombre sabio». Francisco recibió hoy al presidente de Uruguay, José Mujica, con quien mantuvo una conversación privada de 44 minutos en el Vaticano.

El vocero vaticano, Federico Lombardi, dijo tras el encuentro informal, que Jorge Bergoglio comentó: «Estoy contento de haber encontrado a un hombre sabio».

La reunión entre el pontífice y el jefe del estado uruguayo pareció muy cordial a los periodistas presentes y la charla privada es probablemente la más larga concedida hasta ahora por Francisco a un presidente o a un exponente político.

Mujica vestía un traje oscuro y una camisa azul sin corbata y un sweater verde. Estaba acompañado por una comitiva de varias personas pero no por la esposa, Lucía Topolansky, quien lo sustituye como presidenta.

Apenas se vieron, el Papa fue al encuentro de su huésped y le dijo «encantado». Los dos líderes se abrazaron. «Tenemos en común un amigo que no está más», deslizó Mujica. El pontífice lo admitió: «Nos ayudó a pensar». Ambos se referían a Alberto Methol Ferré, pensador y teólogo uruguayo fallecido en 2009.

Al concluir la parte privada del encuentro, tuvo lugar el intercambio de regalos y la posibilidad de hacer fotos.

Mujica donó una composición con tres estatuitas de gauchos y un libro de Alberto Methol Ferré titulado «La América latina en el siglo XXI». El pontífice, por su parte, le regaló una litografía de la fuente de Santa Marta, que el uruguayo agradeció, pero dijo que «tengo que tener una casa nueva para poder colgarla». El Papa le respondió: «Su señora encontrará la manera».

En el momento de la despedida, el Papa dijo a Mujica: «Muchas gracias por haber venido» y se abrazaron nuevamente.

Tras el encuentro, el primer mandatario explicó que Francisco le «agradeció» asimismo que no haya «impreso un Gobierno que buscara la polarización» de Uruguay y se ofreció para «estar a la orden de todo lo que sea posible» en su país, y que, en ese sentido, él también colaborará en cualquier «tarea humana» para la que le llamen desde la Santa Sede.

Consultado sobre si le había pedido algo en particular para Uruguay, Mujica respondió que él pasa «el sombrero por todas partes» y, sobre el tema de la pobreza indicó que, cuando se llega a las «franjas más duras» de ésta, ya no hay un problema meramente económico, sino que hay que hacer algo más.

«Hay que ponerle calor militante, de compromiso. Yo le pido a esta Iglesia, y a todas, que traten de echar una mano militante, no sólo en cuestión de recursos económicos. Hay que poner otros tipos de recursos», expresó el presidente uruguayo.

«Francisco, concluyó, «es un Papa singular para los que somos del Río de La Plata. Es como hablar con un amigo del barrio. Es un Papa que yo creo que, si lo dejan, se va a poner a hacer una revolución en el seno de la Iglesia, hacia la sencillez».

El Vaticano calificó el encuentro de «cordial» en el que «intercambiaron informaciones y reflexiones sobre la situación socio-política del país y sobre el papel de la religión».

Afrontaron «temas de común interés, como el desarrollo integral de la persona, el respeto de los derechos humanos, la justicia y la paz social».

Se destacó, agregó el Vaticano, la «relevante contribución de la Iglesia Católica en el debate público sobre tales cuestiones, además en la paz internacional, como también su servicio a toda la sociedad, especialmente en el ámbito de la asistencia y la educación».

Fuente: Clarin.com