Rossi será ministro de Defensa y el PJ pierde un candidato a diputado – Esto le abrió las puertas de la primera línea a un dirigente rosarino: el actual diputado nacional. La presidenta Cristina Fernández decidió ayer modificaciones en su gabinete de ministros, lo que le abrió las puertas de la primera línea a un dirigente rosarino: el actual diputado nacional Agustín Rossi, quien estará al frente del Ministerio de Defensa. El saliente titular de esa cartera, Arturo Puricelli, fue designado al frente de la cartera de Seguridad, en reemplazo de Nilda Garré, quien revestirá como embajadora argentina ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
Anoche, en medio de un fárrago de llamados de dirigentes y medios periodísticos, Rossi le dijo a LaCapital que aceptó el cargo tras una reunión con la presidenta.
«Cristina me citó y me comunicó la novedad. Acepté de inmediato. Estoy muy contento, es un nuevo desafío, otra muestra de confianza de la presidenta. Voy a ejercer la función con toda responsabilidad que utilicé mientras me desempeñé como presidente de la bancada de diputados», agregó el legislador.
Así, Rossi quedará al margen de la lista de candidatos a diputado nacional por Santa Fe, lo que abre un mar de especulaciones políticas sobre la futura composición de la nómina (ver página 11).
El propio Rossi rechazó cualquier posibilidad de ser postulante a diputado en paralelo con su cargo de ministro. «No, no será así bajo ningún punto de vista, no voy a ser candidato. Es más, voy a renunciar a mi banca», le dijo a este diario.
En su lugar asumirá quien lo seguía en la lista del 2009, el periodista Juan Carlos Bettanín, actual veedor de LT9 de Santa Fe. En tanto, la jefatura del bloque del Frente para la Victoria en Diputados pasará a manos de Juliana Di Tullio.
Hasta que se conocieron los anuncios, Rossi se desempeñaba como el jefe de la bancada kirchnerista en la Cámara baja, lugar que ocupó desde el 10 de diciembre de 2005, cuando accedió a su banca. Antes, en 1987, había sido elegido concejal rosarino hasta 1991, año en que ejerció la presidencia del Concejo Municipal. Tras un parate, en 2002 regresó a una banca en el Palacio Vasallo y en los períodos 2004 y 2005 presidió el Concejo.
Tanto Garré como Puricelli atravesaban dificultades en sus respectivas carteras y fueron así objeto del primer cambio de gabinete que dispuso la mandataria en su actual gestión, episodio que abre versiones sobre la posibilidad de otros recambios en este año electoral, clave para el oficialismo.
Cristina Kirchner, poco afecta a introducir modificaciones en su equipo de ministros, no disponía enroques de sus colaboradores desde que presentó el gabiente de su actual mandato, que en rigor solo tuvo tres caras nuevas respecto al anterior: Abal Medina como jefe, Hernán Lorenzino, en Economía y Norberto Yahuar, en Agricultura y Ganadería.
Garré, ya sin lugar en el gabinete, se encontraba bastante desdibujada en el Ministerio de Seguridad, especialmente tras el nombramiento de Sergio Berni como secretario del área, quien en los hechos pasó a manejar la cartera en medio de un tenso enfrentamiento con la ministra. Uno de los puntos conflictivos que debió capear Garré fue la protesta de los efectivos de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval por una mala liquidación de haberes, que se produjo en octubre del año pasado y que derivó en la renuncia de Raúl Garré, hermano de Nilda, por entonces jefe del gabinete de asesores de la cartera.
Por su parte, Puricelli, quien consiguió mantenerse en el gabinete, también enfrentaba serios problemas en Defensa, ya que sufrió varios problemas, como el escandaloso embargo de la fragata Libertad en Ghana, el hundimiento del buque destructor Santísima Trinidad, en la base naval de Puerto Belgrano, y las denuncias de irregularidades en la contratación de embarcaciones para la campaña antártica.
Ahora, el santacruceño, de quien se decía que quería volver a su provincia como posible candidato a diputado, dejará de manejar las Fuerzas Armadas y pasará a tener a cargo las fuerzas de seguridad interna, aunque todo indica que Berni continuaría manteniendo su fuerte influencia en el Ministerio.
Rossi fue la principal espada del kirchnerismo en la Cámara baja, defendiendo las iniciativas que los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner impulsaban en el Congreso desde 2005.
