– Si bien la propuesta general fue de $ 1750 por tonelada disponible, las fábricas abonaron hasta $ 1820 por lotes grandes en la Bolsa de Comercio de Rosario; hubo leves bajas en Chicago. La muy dialogada venta de la soja remanente de la cosecha 2011/2012 muestra por estos días un sistema de beneficios y castigos en el mercado disponible local, según el volumen que el vendedor puede sumar. En tiempos en que las fábricas operan con una capacidad ociosa importante, a la espera del ingreso de la producción 2012/2013, los que más mercadería ofrecen exigen un valor hasta el que los compradores suelen arrimarse, mientras que el resto, los que no tienen lotes importantes, debe limitar su pretensión a la cifra «abierta» fijada por las procesadoras.
Así volvió a suceder ayer. La oferta abierta de las fábricas fue de $ 1750 por tonelada de soja disponible para las terminales de Ricardone, San Martín y de San Lorenzo, sin cambios respecto del lunes. Sin embargo, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) señaló que «en operaciones por lotes grandes y con entrega casi inmediata se alcanzaban valores próximos a los 1820 pesos por tonelada». La entidad añadió que «unas 10.000 toneladas cambiaron de manos en el recinto». El valor máximo propuesto quedó levemente por encima de los 1800/1810 pesos de la jornada anterior, a pesar de las bajas registradas en la Bolsa de Chicago.
Asimismo, los $ 1820 que algunos vendedores pudieron obtener representaron US$ 361 dólares, según el tipo de cambio comprador del Banco Nación, una cifra bastante superior a la vigente para la soja de la nueva cosecha.
En efecto, por la oleaginosa con entrega en mayo la demanda volvió a ofrecer ayer 330 dólares en San Lorenzo y en San Martín, sin cambios. Como en el caso de la soja disponible, según la cantidad y el momento de descarga, la propuesta de las fábricas pudo «estirarse» hasta los 335 dólares por tonelada. «En esta condición se negociaron unas 6000 toneladas», dijo la BCR.
Para los puertos de Bahía Blanca y de Necochea, los compradores propusieron ayer 332 y 322 dólares por tonelada de soja nueva, 2 dólares más que anteayer, respectivamente.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones mayo y julio de la soja retrocedieron US$ 0,70 y 0,40, mientras que sus ajustes fueron de 334,90 y de 337,20 dólares por tonelada.
Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer bajas de US$ 3,95 y de 3,30 sobre los contratos mayo y julio de la soja, cuyos ajustes resultaron de 539,68 y de 531,23 dólares por tonelada. La toma de ganancias de los fondos de inversión tras las últimas subas y el mejor estado de los cultivos en la Argentina, donde en breve comenzará la cosecha formal, fueron dos de los principales factores bajistas de la rueda.
Acerca del maíz, la única oferta abierta de la jornada volvió a escucharse en Bahía Blanca, donde los exportadores propusieron US$ 183 por tonelada con entrega en abril, 3 dólares más que anteayer.
Los consumos, por su parte, pagaron US$ 172 por tonelada de maíz seco en Baradero y US$ 162 en Chacabuco. El cereal con hasta 18% de humedad para estas plantas se cotizó a 166 y a 156 dólares, mientras que con hasta 21% de humedad lo hicieron a 162 y a 152 dólares, respectivamente.
Por cuarta rueda consecutiva, los precios del maíz cerraron en alza en Chicago. En efecto, los contratos mayo y julio sumaron US$ 1,19 y terminaron la jornada con ajustes de US$ 281,19 y de 273,12. La firmeza del mercado disponible y las escasas reservas estadounidenses fueron los principales fundamentos alcistas. Además, ayer se difundieron nuevas ventas a China (como se amplía por separado).
No hubo ayer ofertas abiertas por trigo argentino, ni de los exportadores, ni de las fábricas. En el Matba, la posición julio subió US$ 1,50 y cerró con un ajuste de 254 dólares.
Respecto del girasol, la demanda pagó $ 1770 por tonelada en Rosario, 15 pesos más que anteayer.
CHINA CONTINÚA COMPRANDO MAÍZ EN EE.UU.
PEKÍN (Reuters).- China compró desde febrero alrededor de 600.000 toneladas de maíz de EE.UU. de la próxima cosecha, que recién llegará a los mercados en septiembre. Los cargamentos fueron adquiridos por molinos forrajeros privados, ante los altos precios domésticos.
Los operadores dijeron que Sinograin, que administra las reservas estatales de China, acudiría a EE.UU. después de finalizado su programa de reposición doméstica, el 30 de abril. China fijó su cuota anual de importación de maíz forrajero en 7,2 millones de toneladas, por encima de los 5,2 mill./t de 2012.