Los turistas se ajustaron: menos ocupación y consumo – Operadores y empresarios reconocen bajas de hasta el 25% respecto al verano 2012. Especular es riesgoso. En noviembre muchos anticiparon que ésta sería una temporada récord por las restricciones impuestas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) para conseguir dólares y el impulso que le darían al turismo interno. Pero se fue la primera quincena de enero y en Mar del Plata los números no se posicionaron en el ránking. Tampoco en Pinamar ni en Carlos Paz. Este, que iba a ser un verano glorioso en los principales centros turísticos, se proyecta como «tranquilo» o más bien, «flojo», con menos ocupación y consumo en comida y entretenimiento.
Los primeros 12 días de enero pasaron por Mar del Plata 526.000 visitantes, según estadísticas del Ente Municipal de Turismo (EMTUR), lo que significa apenas un 1% más que durante el mismo periodo del año pasado. El volumen de gente es similar al verano anterior, pero lo que cambió es el comportamiento: La Feliz se colma hacia el fin de semana, y entre lunes y miércoles se desinfla. ¿Los motivos que argumentan los operadores? Por un lado, este año no hubo un evento como el Dakar que no sólo convocó gente sino que hizo que se quedaran. Por otro, el clima no acompaña (ayer estuvo nublado e hizo 21,2° de máxima) y las clases empiezan muy temprano. Los feriados puente evidencian un cambio cultural respecto del descanso: los turistas «exprés», que vienen por menos tiempo para volver durante el año, marcan el ritmo de este verano, como ya publicó Clarín .
Hasta ahora lo único que dejó conforme fue el movimiento para las Fiestas. » Y después la temporada nunca arrancó.
Estamos trabajando a un 50% y los fines de semana no llegamos al 80%», señala un referente en hotelería de Mar del Plata que pidió reserva de su nombre. Y agregó: «Hay poca reserva anticipada y los que vienen, se quedan como mucho cuatro días». En el Colegio de Martilleros notan que hay turistas con poder adquisitivo que reservan casas de alta gama, pero por menos tiempo, y que el grueso que reservaba departamentos se «ajustó». «Ahora se acomodan dos parejas en un dos ambientes, cuando antes alquilaban un departamento cada una», apuntan. A pesar de la inflación, la entidad decidió no superar el 20% de aumento respecto a 2012. La gastronomía de lujo se resintió un 15%, según datos del sector, y ganaron los tenedores libres o la venta de comida al peso. El teatro es el rubro que más sufre esta temporada (ver En Mar del Plata…). Muchos observan que la ciudad está perdiendo la clase media, un segmento fiel y ventajoso.
Pablo Fernández, titular del EMTUR, ofrece otra mirada: «No es una mala temporada. Estos cambios favorecen el ritmo turístico durante el año, de hecho en 2012 pasaron 100.000 turistas fuera del verano. No hay que especular sino trabajar para tener una temporada exitosa». Tradicionalmente la segunda quincena de enero es la más fuerte y los empresarios turísticos confían en que será mejor, pero no esperan un cambio radical.
En Pinamar, oficialmente admiten que la ocupación de la primera quincena estuvo entre el 70% y el 75%, y los referentes del rubro dicen que este verano es al menos un 20% más flojo que el anterior. Sobre el alojamiento, hubo un aluvión de reservas entre septiembre y octubre del año pasado, pero después cayó. Eugenio Hoffmann, dueño de una inmobiliaria, coincide con la cifra oficial y cree que en la segunda habrá más gente, pero que serán los dueños de propiedades o sus amigos (ver Casas…). En los restaurantes, los encargados hablan de un descenso del consumo del 25%. Y en la propia Secretaría de Turismo, sin perder el optimismo por la segunda quincena, reconocen que esta temporada habrá que «remarla bastante» .
Los operadores cordobeses coinciden en que la temporada es «floja» en comparación con el verano pasado y esperan un repunte los próximos quince días. A propósito, el gobernador José Manuel de la Sota coincidió con la percepción de los marplatenses de que hay un turista «ajustado»: «La gente recorta gastos por la incertidumbre económica». Al igual que ocurre en la Costa, en Córdoba también se ve fuerte un turismo de fin de semana. De acuerdo a los datos oficiales de la Agencia Córdoba Turismo, el domingo se registró en Villa Carlos Paz y Villa General Belgrano una ocupación del 92%.