Cuando el Spartak de Moscú sorprendía en el Camp Nou, la Pulga marcó un doblete para el 3-2 definitivo.

Messi volvió a ser el héroe del Barcelona – El partido se le había complicado al Barsa. El Barcelona nunca cambia su estilo. La paciencia es una de las armas más importantes que tiene el equipo de Vilanova. Ni encontrarse perdiendo un partido que tenía ganado hace que negocie su esencia. Y encima tiene una carta ganadora para cualquier equipo del mundo: Messi, el crack de apariciones extraordinarias, que cuando la historia ante el Spartak de Moscú estaba complicada decidió el partido con un doblete. Fue 3-2 en el Camp Nou por la primera fecha de la Champions League.

Los primeros minutos mostraron a un Spartak que esperó con un 4-5-1, sin presionar pero haciéndose ancho y corto. Los dirigidos por Tito Vilanova tocaron a placer en ese comienzo esperando su momento. Primero llegaron con un corner que jugaron por lo bajo para que Piqué disparara y se fuera cerca del palo. Luego Messi asistió magistralmente a Tello, pero el delantero le erró al arco. El juvenil – que sorprendió a muchos al estar en la formación inicial en lugar de Sánchez o Villa – tuvo revancha rápido: tomó una pelota cerca del área, se sacó la marca y colocó con justeza su tiro para poner el 1-0.

Un tiro de Messi que rozó la red lateral invitaba a soñar al Camp Nou con una goleada. Pero poco después llegó la inesperada igualdad, cuando un desborde por la izquierda de la defensa catalana terminó con un rechazo fallido de Dani Alves que se transformó en un gol en contra ¿Cuánto tuvo que ver la lesión que sufrió Pique durante el juego y la improvisada dupla central que el técnico formó con Song y Mascherano? El Barcelona tenía que volver a empezar.

Lionel Messi fue el protagonista exclusivo del segundo acto. Tuvo la chance de poner el segundo de su equipo, pero Dykan se lo evitó. De esa jugada, llegó una contra letal en la que Rómulo sorprendió a todos al marcar el 2-1 del Spartak. El argentino se puso la ropa de héroe – esa que tan bien le queda – y dio vuelta el partido con dos goles. El primero fue tras una gran jugada de Tello que empujó a la red. El segundo, por medio de una conexión sudamericana: centro del chileno Sánchez y cabezazo suyo para sentenciar. El Barcelona arrancó así triunfante en el máximo torneo continental del mundo.