Silva salvó a Boca en el minuto final – Riquelme y Jaime, los otros goles. Fue el choque de ida por los octavos de final. Sobre la hora y con un gran cabezazo de Santiago Silva, Boca superó 2-1 a Unión Española de Chile como local por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. El 1-0 había sido obra de Juan Román Riquelme, mientras que Sebastián Jaime había puesto el 1-1 parcial. El próximo miércoles, en Santiago, se jugará la revancha para definir el pase a cuartos. Contra lo que muchos hubieran pensado, no fue Boca el primero en pisar el área final en el choque de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores en la Bombonera, si no la Unión Española de Chile, que con un zurdazo de Sebastián Jaime al minuto de juego que salió no muy lejos del poste derecho de un Agustín Orion que seguro hizo vista. El equipo dirigido por José Luis Sierra era prolijo en el manejo y a los de Julio Falcioni se les, merced de eso, hacerse de la pelota en el inicio. Tanto fue así que recién sobre el cuarto de hora Boca pudo patear al arco custodiado por Eduardo Lobos, cuando Riquelme encaró por el medio y soltó el derechazo que el arquero visitante pudo despejar. Volvió a buscar la espalda de Clemente Rodríguez el equipo trasandino. De un centro desde esa zona de Cordero, el centrodelantero Herrera no pudo sacar provecho, ya que su cabezazo no fue lo suficientemente cruzado como para que Orion no pueda retenerlo. La respuesta xeneize vino con un centro de Ledesma desde la derecha que Cvitanich bajó hacia atrás para Silva, que pudo soltar n zurdazo cruzado que Lobos embolsó. El desahogo para Boca llegó con un golazo, a los 24, cuando Clemente bajó hacia atrás un cambio de frente y habilitó a Román, que pifió y la pelota desembocó en Cvitanich. El delantero, dentro del área, se la devolvió al 10, que con un zurdazo cruzado y ajustado marcó el 1-0. Volvió a llegar Boca, pero Lobos se lo tapó bien a Erviti cuando pateó desde dentro del cuadrado mayor. También pudo empatar el equipo chileno cuando un cabezazo de Jaime salió apenas afuera. Una muy mala noticia recibió Boca sobre el epílogo de los primeros 45, cuando Ledesma se lesionó una de sus rodillas al chocar con Ampuero. En su lugar, en el inicio del complemento, ingresó Pablo Ledesma. En el segundo tiempo, Boca pareció sentir la baja de Ledesma, a la vez que el equipo visitante intentaba ir por la igualdad, pero sin claridad. Sin embargo, en un error defensivo, producto de un cabezazo hacia atrás de Erbes, Jaime se llevó la pelota y no tuvo problemas para vulnerar a Orión y enmudecer a los miles de hinchas locales. Herido en su orgullo, Boca recuperó la iniciativa, ganó en vértigo con los ingresos de Mouche y Sánchez Miño, y aunque quedaba más expuesto en la defensa, fue en busca de la victoria. En una gran acción individual, Erviti estuvo muy cerca de anotar, pero su remate rebotó en el poste derecho, y poco después, Silva desvió un frentazo por muy poco. El empate no le quedaba mal al partido, ya que Unión Española había acumulado méritos para llevarse el punto, pero Boca estuvo más ambicioso en el último tramo, y encontró el éxito en una corrida individual de Mouche, que envió un gran centro para el cabezazo goleador del ‘Tanque’ Silva, imponente en el salto y la definición. Sin sobrarle un centavo, Boca se quedó con el primer capítulo, pero deberá mejorar su rendimiento colectivo para salir airoso del desquite, ante un adversario que le desnudó varias flaquezas y que intentará dar el gran impacto dentro de una semana, en un desquite de carácter impredecible y atrayente.
