Buscando la belleza – Metales y piedras comienzan a definir la forma definitiva. Los escultores trabajan duro antes de entrar a la zona de los detalles. Cada día es una fiesta en el Simposio de Escultores.
Las obras avanzan de manera increíble. De un día para otro, cada material «muerto» toma vida. La gran sorpresa del tercer día fue Mateo Torres. El Jujeño, que se la pasó soldando los primeros dos días sin mostrar nada, en horas, materializó una tremenda águila de metal que dejó perplejos a todos.
A su lado, Guli Silva se encarga de la cabeza de un «Velocirraptor» que va tomando vida.
La francesa Boudevin, muy metida en su estilo crea un árbol surrealista. Su obra muestra mucha sutileza.
Los tres hombres de la piedra, Mercurio, Nanni y Kersting, ya mostraron formas definitivas en sus trabajos y la americana Nora Valdez empieza con los detalles.
El sol volvió a la ciudad, y una caminata por la ruta de los escultores, es imposible de obviar.