En el segundo partido de Sabella al frente del equipo, Argentina venció por 3-1 a Nigeria en Bangladesh con goles de Higuaín, Di María y Elderson en contra.

Otra prueba superada con victoria para la Selección – Messi volvió a mostrar su talento y fue decisivo en los dos primeros goles. Segunda prueba y otro aprobado para la Selección Argentina que conduce Sabella. Esta vez fue 3-1 ante Nigeria en Bangladesh con un gran partido de Lionel Messi, a quien se le sigue negando el gol pero que fue partícipe directo de los dos primeros. Higuaín, Di María y Taiwo, en contra, los goles de Argentina, mientras que Obasi descontó para los africanos.

En el arranque, Argentina hizo un culto de la posesión de la pelota. La cuidó y la controló ante una Nigeria amarreta. A los 4, la primera de peligro. Higuaín que presionó a la defensa africana y ganó. Habilitó a Sosa. Pero el tiro del ex Estudiantes fue débil y a las manos del arquero Ayenugba. A los 10, la respuesta de las Aguilas con un tiro de Obbina que se fue por arriba desde una buena posición. La primera de Messi se dio a los 11, cuando encaró desde mitad de cancha y buscó al Pipita. El pase fue apenas largo y el arquero nigeriano abortó la situación. Y, un minuto después, Nigeria tuvo otra chance. Porque Uche picó habilitado y, casi sin darse cuenta, se encontró con un Romero que salió lejos del arco. Pero el delantero frenó, dudó y perdió. El arquero, con el pie, la mandó al córner.

La Pulga, la atracción excluyente de este amistoso por el que la Federación de Bangladesh habría pagado 4 millones de dólares, se instaló sobre la derecha y comenzó su show personal. A los 17, encaró y fabricó un tiro libre. Se hizo cargo de la ejecución y estuvo a centímetros de gritar su gol. Luego, a los 24, se juntó con Sosa y con un preciso toque de zurda habilitó a Higuaín. El Pipita, en el medio del área, la acomodó con el pecho y definió de derecha para marcar la diferencia merecida.

Dos minutos más tarde, Messi frotó la lámpara. Le robó la pelota al Mikel Obi y comenzó su obra. Dejó tres rivales en el camino y tocó de zurda ante la salida del arquero. La pelota quedó boyando y Di María la empujó casi sobre la línea. Ovación para el capitán de la Selección. Se acabó el partido. Porque Argentina impuso su ritmo y porque Nigeria molestó con tibios remates de media distancia. En el final, la Selección tuvo otra: Messi gambeteó de derecha a izquierda, como en el Barcelona, y saca un tiro cruzado que el arquero desvió con la puntita de los dedos.

El descuento de los nigerianos, a los 49 segundos, desacomodó al equipo argentino. El gol llegó por una impericia en el fondo de Argentina. Porque Demichelis rechazó para el medio, la pelota rebotó en Obasi y derivó hacia Mikel. Centro atrás y derechazo de Obasi para vencer a Romero. Fue, entonces, el momento más flojo de la Selección. Porque perdió protagonismo. Y Nigeria molestó con remates de media distancia. Obbina probó y Romero controló sin inconvenientes. Hasta que llegó el alivio para la celeste y blanca…

A los 19, Di María encaró y puso un buen pase entre los dos centrales de Nigeria. Higuaín tocó ante la salida del arquero, hubo un rebote y Elderson se la llevó puesta. Gol en contra y respiro. Se notó en el festejó de Sabella: celebración con puños cerrados. Un gol que llegó en el momento justo.

Messi, sin ser el del primer tiempo, marcó el rumbo del equipo. Y de las tribunas. Cada vez que tocó la pelota levantó suspiros. Como cuando hizo la pausa y se la sirvió por arriba a Di María. Pero el del Real Madrid le pegó fuerte y por arriba. Entró Jonás Gutiérrez por Rojo. También ingresaron Agüero (Higuaín) y Banega (Di María). La Pulga jugó al trote los últimos minutos. Hizo de asistidor, ya resignado por ese gol propio que no quiere llegar. No hubo tiempo para mucho más. Apenas para que Federico Fernández (Zabaleta) y Ricardo Alvarez (Sosa) sumen minutos para los partidos que vienen. Los de las Eliminatorias.