La presencia de Noruega en Afganistán y las caricaturas de Mahoma, ejes del ataque – ¿Qué es lo que hacen los soldados noruegos en Kabul? «La participación militar de Noruega en Afganistán es importante». Lo reconoce el propio Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país en su web oficial. Precisamente, el gobierno de Oslo ha enviado a unos 700 soldados en el marco de la participación de la OTAN en Afganistán. Entre ellos, se encuentran un equipo de Reacción Rápida que se encuentran en Mazar-e-Sharif, un equipo de reconstrucción provincial en Meymaneh y una unidad de fuerzas especiales en la zona de Kabul.
El 1 de abril de 2007, Noruega asumió la responsabilidad de operar el Aeropuerto Internacional de Kabul. «Noruega está comprometida en los esfuerzos de estabilización en Afganistán. Además de continuar su contribución militar, aumentará sensiblemente sus esfuerzos humanitarios y la cooperación a largo plazo», aseguran desde la cartera del canciller. Pero es precisamente su presencia en ese país, la que ha generado la ira de los yihadistas. Un grupo de ellos, conocido como Ansar Al Jihad Al Alami, emitió un comunicado en el que reivindica los ataques terroristas ocurridos hoy en Oslo en los que murieron al menos 15 personas. Y pide la salida de sus Fuerzas Armadas de Afganistán.
A modo de ejemplo, Noruega proporcionó 450 millones de coronas (unos 83 millones de dólares) en el desarrollo y la asistencia humanitaria de Afganistán en 2007. Según las autoridades noruegas, el objetivo de su participación era poner en marcha «medidas a largo plazo para que las autoridades afganas logren la capacidad de satisfacer las necesidades de la población».
La intervención en el país del Hindu Kush es rechazada por los extremistas islámicos como Ayman Al Zawahiri, el líder de Al Qaeda tras la muerte de Osama Bin Laden, quien aseguró que Noruega era uno de sus posibles objetivos.
Además, de la participación militar noruega, otro de los motivos que llevaron a los yihadistas a atacar en Oslo –según publicaron en el comunicado- han sido «insultos contra el profeta Mahoma». Los expertos en terrorismo internacional, como el CNA, interpretaron esas palabras como la republicación de las caricaturas de Mahoma, que fueron originalmente editadas por un diario de Dinamarca y luego reproducidas por varios medios escandinavos.
El dibujante Kurt Westergaard dibujó a Mahoma, el profeta del Islam, con un turbante en forma de bomba con la mecha encendida, algo que ofendió a la comunidad islámica. Esas caricaturas fueron publicadas por primera en el diario danés Jyllands-Posten el 30 de septiembre de 2005. El 30 de enero de 2006, varios diarios europeos volvieron a publicarlas como un acto de defensa de la libertad de expresión. En plena polémica, el día 4 de febrero de 2006 fueron incendiadas las embajadas de Dinamarca y de Noruega en Damasco, Siria y el consulado danés de Beirut, en Líbano. Dos días después, centenares de iraníes atacaron las embajadas de Dinamarca y Austria en Teherán. En 2008 Kurt Westergaard sufrió un intento de asesinato. Hoy, una bomba estalló en Oslo matando al menos 11 personas y otras 4 murieron en un tiroteo en un campamento cercano a esa ciudad.
Fuente: Clarín.com
