Estuvo al frente de la embajada entre 1993 y 1996.

Falleció el ex embajador de EE.UU. en Buenos Aires James Cheek – Fanático de San Lorenzo, mostró públicamente un perfil dicharachero y se decía un enamorado de la Argentina. Por el perfil dicharachero que mostró en su paso por la Argentina, por haberse declarado un enamorado de estas tierras y por su explícito fanatismo por San Lorenzo, al que iba a ver a la cancha y sobre el que bromeaba incluso con Marcelo Tinelli, James Cheek fue uno de los embajadores de Estados Unidos en Buenos Aires de mayor conocimiento público en las últimas décadas. Según pudo confirmar Clarín de fuentes diplomáticas, murió hoy.

Cheek llegó a la embajada en 1993 como sucesor de Terence Todman y abandonó el cargo en 1996. Durante sus años de estadía en la Argentina, un país del que decía estar enamorado, se mostró muchas veces con un registro humorístico, con una sonrisa casi permanente y bromeando en público en particular en torno a su declamado fanatismo como hincha de San Lorenzo.

Se lo consideraba un amigo del ex mandatario estadounidense Bill Clinton y mantuvo una cercana relación con el entonces presidente argentino Carlos Menem, en las épocas en las que el entonces canciller Guido Di Tella había calificado al vínculo bilateral como «relaciones carnales».

Tras su salida de la Embajada, pasó como lobista o director por varias empresas que operaban en la Argentina, como Ogden, American Airlines, Mattel y la distribuidora de agua Azurix. Como director de Ciccone Calcográfica tuvo que declarar ante la Justicia en el caso de una presunta estafa. Esas actividades empresarias le permitieron seguir viniendo durante un tiempo a la Argentina, ocasiones en las que aprovechaba para ir a ver a San Lorenzo.

Estaba radicado en la ciudad de Little Rock, en el estado norteamericano de Arkansas.