El adelanto – Trebolense perdió en el resultado ante el «Dream team» de San Jorge y se lesionaron seriamente tres jugadores. Trebolense pudo tener una noche para la historia y terminó siendo tremendamente amarga.
Porque enfrentó al «Dream Team» de San Jorge y hasta lo superó en juego y en el resultado en el primer tiempo.
Pero cuando la jornada empieza «con la pata izquierda» a veces, hasta termina peor.
De entrada, en el calentamiento, Bergero debió sacar a Alberto Bravo, que se resintió de un golpe en la rodilla del domingo anterior. Entró su hermano Ezequiel y así se largó el partido.
El árbitro del encuentro fue Norberto Moyano, que volvió a la Liga y que en estas horas será el asistente del cotejo de Newell´s ante Estudiantes por la Sudamericana. Y su actuación fue buena a pesar de sus asistentes.
De entrada se lesionó Martín Román en una de sus tantas subidas y debió ingresar Ignacio Vasallo. Bergero volvió a mover el equipo, bajó a Bravo y lo puso de carrilero al recién ingresado Vasallo.
El sueño
Y así Trebolense tuvo un primer tiempo memorable. Por momentos se ganó la ovación de la tribuna y hasta «toqueteó» al «Dream Team Sanjorgense».
En defensa se destacaban los trabajos de Julián Piancatelli y Gabriel Bracco y Manuel Pochettino – de muy buen nivel en los últimos cotejos- ahogó un par de gritos «uruguayos». El «Celeste» tuvo tres ocasiones claras de gol que desaprovechó por la falta de gol que desde todo el año lo aqueja.
Recién gol llegó de penal para Trebolense, cuando Alegre «tacleó» a Salvador Lépore en el área. Moyano no duda y cobra penal. Patea Martínez, travesaño y gol, pero el referee hace patear otra vez por invasión de área (?). Vuelve a patear Héctor, implacable y a facturar. Uno a cero y al descanso con Trebolense aplaudido.
La pesadilla
De arranque, en el complemento, San Jorge pareció una tromba. Un poco por peso propio, otro por un Trebolense que no resistió el ritmo del cotejo ante el equipo del Argentino B. El «Celeste» se equivocó mucho en los pases de Rodriguez y Pignatta – sus grandes generadores de fútbol – y Atlético comenzó a ser protagonista con el movedizo Zímaro, el exquisito Comba y el tremendo Romero.
Llegó el gol de San Jorge de penal capitalizado por Zímaro tras falta sobre el mismísimo jugador por parte de Martínez y las desventuras seguirían con la lesión – seria?- de Salvador Lépore en el brazo que lo tuvo al margen de las canchas por una fractura a principios de año y de Bracco con un tirón muy fuerte en el abductor.
Entonces Atlético fue el mejor Atlético y otra vez Romero ganó las espaldas del «Pato» Martínez para tirar el centro y que el propio «Colorado» Comba decretara en gol, triunfo, tres puntos y … clasificación?
Pudo ser una noche histórica, termino siendo una pesadilla. No por la derrota que el equipo de Bergero vendió cara con entrega amor propio, pero sí por las tres lesiones, que pesarán profundamente en las aspiraciones de Trebolense de aquí a fin de año.
