Fue 74-72 frente a Australia, con 31 puntos del Luifa.

Un Scola brillante llevó a Argentina al triunfo – La Selección estuvo casi todo el partido abajo y alcanzó a reaccionar sobre el final para lograr su segunda victoria. Volvió a dejar su sello está Selección de básquet acostumbrada al trabajo duro para poder disfrutar. En un partido que no dejó ningún espacio para tomarse un respiro, se impuso por 74 a 72 a Australia apoyada en su conocida estirpe ganadora y un Luis Scola brillante que obtuvo 31 puntos y apareció siempre que se lo necesitó.

Australia le planteó dificultades importantes a Argentina desde el comienzo del partido, al punto de que no le permitió en ningún momento estar arriba en el marcador. De entrada sacó diferencias y llegó a sacar una distancia de 8 puntos cuando se puso 13-5. Argentina logró recortar, en buena medida por un par de triples de Prigioni, pero no pudo evitar quedar 25-20 abajo al final del primer cuarto.

El segundo período mostró un refuerzo de las defensas de los dos equipos, combinado con una importante sequía en ofensiva. Es elocuente en ese sentido el dato de que Argentina tardó 3 minutos y 13 segundos en poder marcar, mientras que Australia se demoró 4 minutos con 44. Parecía que el partido se podía empezar a encarrilar para la Selección, pero un muy flojo cierre del cuarto determinó que se fueran a los vestuarios 39-33 para Australia.

Cuando era de esperar que llegara la reacción de Argentina, los problemas empezaron a acentuarse. Delfino, de actuación apagada, quedó con cuatro faltas cuando todavía quedaban catorce minutos de juego y se vio obligado a salir, con un equipo que cada vez dependía más de lo que pudiera generar Scola. Australia llegó a sacar 10 puntos (53-43) y el equipo seguía sin dar respuestas sólidas ni en ataque ni en defensa. Pero Argentina metió un parcial de 6-0 y renació la ilusión. Así se llegó al 52-56 del final del período que dejaba todas las puertas abiertas.

Y en el último cuarto aparecieron los factores necesarios para llegar al triunfo. Porque se ajustó la defensa, la Selección tiró toda su chapa a la cancha y terminó de aparecer un fuera de serie como Luis Scola para cargarse el equipo al hombro y encabezar la reacción. Llegó a sacar 6 puntos Argentina, pero Australia igualó y hubo que volver a trabajar. Hasta que llegó ese final dramático, cuando el partido ya estaba, pero se perdió una pelota increíble a 3 segundos del final y hubo que aguantar hasta la última para asegurar la victoria. Ese 74-72 que ratifica la marca ganadora de esta Selección y la deja bien firme en la carrera para ganar el grupo.