Fuentes policiales confirmaron que se trata de Maximiliano Salgado, de 18 años, que se encontraba desaparecido, y descartaron la presencia de más víctimas.

Encontraron un cuerpo y ascienden a tres los muertos tras el derrumbe – Ayer fueron halladas dos personas fallecidas; sigue la remoción de escombros. Pasadas las 7.20, equipos de rescate encontraron un cuerpo y así ascendieron a tres las víctimas fatales tras el derrumbe del gimnasio, ocurrido el lunes pasado.

Desde el lugar, fuentes policiales confirmaron a la prensa que se trata del estudiante de comunicación, Maximiliano Salgado, de 18 años, la última de las víctimas que se encontraban desaparecidas.

«Lo identificamos por sus pertenencias», informó el comisario Sergio Fenoi. «Estaba muy cerca de donde encontramos a Luis Lu», indicó.

Personal de la Morgue Judicial trasladó el cuerpo de la zona del accidente, mientras familiares y amigos no encontraban consuelo tras 40 horas de angustia y la espera de un milagro.

Tras confirmar el tercer fallecido, la policía descartó esta mañana que haya más víctimas en el lugar.

Ayer, personal de bomberos y rescatistas lograron hallar los cuerpos de Luis Lu, de 23 años, y de Guillermo Fede, de 37.

Anoche, a los familiares de Lu, que estaban en el lugar, se les comunicó la noticia. Allí recibieron asistencia psicológica de los equipos profesionales. Otras once personas, que habían sido rescatadas con vida, se recuperan de las heridas en distintos hospitales de la zona.

En la tarde de ayer, el director médico del SAME, Carlos Russo, precisó que en el operativo de rescate y salvamento los perros utilizados para el rastreo de víctimas «marcaron varios lugares», para buscar a Maximiliano, del que hasta esta mañana se desconocía su paradero.

El primer fallecido encontrado fue identificado en la mañana de ayer como Guillermo Ramón Fede, de 37 años y empleado del gimnasio.

El cuerpo se encontró bajo la mampostería a través de un videoscopio, una sonda que se introdujo entre los huecos que lograron hacerse entre los escombros.

«Vibraban las paredes». El dueño del gimnasio que se derrumbó, Pablo Galli, afirmó que «no había pasado nada» en el local en momentos previos a la tragedia, aunque remarcó que «vibraban las paredes», lo que lo llevó a pensar en cerrar el establecimiento de manera temporaria.

«Los bomberos me trajeron a la vida otra vez porque creía que no salía de ahí, la situación era bastante asfixiante», señaló Galli en declaraciones a Canal 13.

Remoción. Por su parte, el director de Medios de Comunicación de la Policía Federal, comisario mayor Ricardo Pedace, había asegurado que «se está trabajando muy lentamente en la remoción de escombros para evitar un mal peor».

En medio de una gran tensión, bomberos y rescatistas con perros entrenados en la búsqueda de personas continuaron durante la madrugada con la remoción de escombros y los esfuerzos para encontrar con vida a Maximiliano Salgado.

Las causas del accidente 

Un instructor del gimnasio señaló que durante la mañana del lunes una retroexcavadora había comenzado a horadar el suelo en el terreno de Mendoza 5042, donde se iba a construir un edificio de 11 pisos.

El 17 de junio último, la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) había denunciado ante la Dirección General de Protección del Trabajo del gobierno porteño que, en la etapa de demolición, existían falencias en las condiciones laborales en las que desempeñaban sus tareas los obreros y, además, señalaba que faltaban apuntalarse los muros medianeros.

Pedido de informes. El ministro de Desarrollo Urbano porteño, Daniel Chaín, anunció que pedirán un peritaje a la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (UBA) para que determinen las causas del derrumbe.

«Ha sido un horror lo que sucedió», dijo al funcionario sobre el hecho en declaraciones formuladas a la prensa tras una reunión, en la Legislatura de la Ciudad, con diputados de los diversos bloques parlamentarios.