Chávez rompió las relaciones con Colombia y aludió a una guerra – El bolivariano dijo que tomó la decisión «por dignidad». Agregó que Uribe es capaz de causar un enfrentamiento. Con «una lágrima en el corazón», según dijo, en presencia de Diego Maradona –que lo visitaba– y de una nube de periodistas que ayer llegaron hasta la sede presidencial venezolana, el presidente Hugo Chávez anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con su vecina Colombia , en el epílogo de la más dura crisis con el saliente gobierno de Alvaro Uribe que, según dijo, lleva a que ambas naciones estén abocadas a un «riesgo de guerra».
Bogotá, que calificó la medida de «errónea», presentó pruebas ante la OEA sobre la presencia de campamentos rebeldes en ese país con la complicidad de Chávez y dijo que debería ser con los terroristas con quien Caracas corte sus nexos.
«Lo anuncio con una lágrima en el corazón: Venezuela rompe a partir de este momento todas las relaciones con el gobierno de Colombia», dijo Chávez en el Palacio de Miraflores, tras ordenar a su tropa «estar en alerta» en la frontera «ante una posible agresión » por parte de Bogotá.
El presidente venezolano adujo «cuestiones de dignidad» para adoptar la medida y acusó al actual mandatario colombiano de originar la crisis diplomática. «Uribe es capaz de provocar un enfrentamiento armado entre nuestros países», subrayó. Maradona fue testigo mudo de la ruptura.
Es la primera vez, desde que Chávez asumió la presidencia en 1999, que su gobierno rompe relaciones con Colombia, si bien ésta ha estado marcada por constantes roces tanto con el actual gobierno como con su antecesor, Andrés Pastrana (1998-2002).
Sus declaraciones se produjeron luego de una sesión extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) convocada por Colombia en la que éste gobierno presentó videos, fotografías y testimonios de rebeldes desmovilizados que daban cuenta de varios de los jefes de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en territorio venezolano.
«Uribe es capaz de mandar a montar un campamento (rebelde) simulado del lado venezolano para atacarlo y causar una guerra . A una guerra con Colombia habría que ir llorando, pero habría que ir», advirtió Chávez, quien aseguró que su gobierno «persigue y hostiga» a la guerrilla colombiana.
«Si hubiera algún campamento guerrillero colombiano (en territorio venezolano), sería sin mi autorización», enfatizó Chávez que, tras calificar a Uribe de » un enfermo lleno de odio que se va caminando al basurero de la historia», dijo confiar en que las relaciones mejoren con su sucesor, el ex ministro de Defensa, Juan Manuel Santos.
Desde México, donde inició una gira por varias naciones latinoamericanas –incluyendo la Argentina– Santos se abstuvo de pronunciarse sobre la decisión del gobierno venezolano. «Sobre la relación con Venezuela hemos decidido que nuestra mejor contribución es no pronunciarnos porque Alvaro Uribe es todavía presidente en funciones hasta el 7 de agosto», señaló Santos, requerido por periodistas.
Desde Quito, en tanto, Angelino Garzón, futuro vice presidente colombiano, puso de relieve el objetivo de Santos de «normalizar las relaciones con Venezuela y fortalecer los vínculos» con las demás naciones. «Haremos todo lo posible y utilizaremos todos los amigos que tenemos en diferentes países del mundo y buscaremos todos los mecanismos diplomáticos para mejorar y fortalecer las relaciones con todos los países de la región, incluyendo a Venezuela», expresó Garzón.
El embajador colombiano ante la OEA, Luis Alfonso Hoyos, calificó de «errónea» la decisión venezolana y dijo que, en lugar de romper con el gobierno legítimo y democrático de Colombia, Chávez «debiera romper mejor sus relaciones con las bandas criminales». Horas antes, las denuncias de Bogotá sobre la presencia de rebeldes en territorio venezolano fueron rechazadas por el diplomático venezolano Roy Chaderton quien, luego de un infructuoso cabildeo para sabotear la sesión, descalificó las acusaciones. «Es un circo mediático», «Ahora cuéntenos una de vaqueros» , dijo Chaderton en referencia a las denuncias presentadas por Hoyos.
Chávez ya había congelado relaciones con Colombia pero a nivel comercial desde julio de 2008 por un acuerdo militar entre Bogotá y EE.UU., que le permite a tropas de este país operar en al menos siete bases colombianas, lo que consideró como un riesgo para su gobierno. En Bogotá se da por descontado que la crisis se mantendrá hasta que Uribe salga del poder.
Clarin.com
