Caso Burdisso – Ya están las condenas de un caso que sacudió a la ciudad de El Trébol y la región. «Hubiera sido un caso para juicio oral pero fue antes de que se modificara el código, de todas maneras ya hay sentencia. Huck fue condenado a siete años por homicidio simple y además está cerca de los 70 años y los otros dos casos por premeditación y alevosía», le manifestó el Dr. Eladio García a El Trébol Digital. Tras dos años de espera por el asesinato de Alberto José Burdisso finalmente el caso tiene sentencia.
La justicia dictaminó que, por el asesinato de Alberto José Burdisso en el mes de junio de 2008 en El Trébol, Gisela Córdoba y Marcos Brochero deberán cumplir veinte años de sentencia, mientras que Juan Huck tendrá que estar tras las rejas siete años.
«Hubiera sido un caso para juicio oral pero fue antes de que se modificara el código, de todas maneras ya hay sentencia. Huck fue condenado a siete años por homicidio simple y además está cerca de los 70 años y los otros dos sujetos tienen una condena de 20 años por premeditación y alevosía», le manifestó el Dr. Eladio García a El Trébol Digital.
«Me llena de satisfacción»
Desde su despacho García además agregó: «Este caso nos sirvió y mucho. Hemos aprendido enormemente de este lamentable hecho. Me siento conforme con la sentencia. Uno trabaja mucho en esto y cuando se hace justicia uno se ve reconfortado. Se esclareció el caso y es muy importante. Me llena de satisfacción».
El caso Burdisso se elevó a Sentencia Sexta de Santa Fe el 29 de septiembre de 2008 con la carátula «Brochero, Córdoba y Huck sobre homicidio».
La muerte
Alberto Burdisso fue arrojado en un pozo de una tapera con vida, cuando fue llevado engañado por Marcos Brochero, Gisela Córdoba y Juan Huck a «juntar leña» a una campo ubicado 8 kilómetros al este de El Trébol. Un brocal le fue derrumbado sobre su humanidad de Burdisso cuando aún estaba con vida. Según los estudios realizados al cuerpo, Burdisso, falleció días después por asfixia.
El motivo del asesinato era netamente económico, ya que estaba en juego una vivienda y pertenencias de la víctima, que mantenía alguna relación amorosa con Córdoba.
El día que encontraron a Burdisso
El 20 de junio de 2008, promediando las 10, el cuerpo de zapadores de Bomberos Voluntarios de El Trébol tras intensas búsquedas halló un cuerpo en la profundidad de un aljibe abandonado.
El hecho se produjo en un campo ubicado a 8 km de la ciudad de El Trébol donde existe una vieja tapera abandonada con dos antiguos aljibes. El cuerpo apareció debajo de muchos escombros y chapas. La Policía trabajó en el lugar y realizó los peritajes. Al mediodía llegó el juez Eladio García, y se procedió a la extracción del cuerpo que luego fue trasladado a la ciudad de Santa Fe para la necropcia correspondiente.
El Dr. Jorge Gómez, en ese entonces Jefe Principal de la Unidad Regional XVIII con asiento en Sastre, comentó ese viernes por la noche que el cadáver aparecido en zona rural «fue remitido al Instituto Médico Legal para establecer su identidad y el motivo de su deceso».
«Nosotros tenemos datos que nos dicen que podría ser Alberto Burdisso», había podido asegurar el Jefe de la UR XVIII en base a que «hubo reconocimientos que están plasmados en las actas y los expedientes».
Consultado por la prensa sobre si era verdad que el cuerpo hallado -en avanzado estado de descomposición- tiene una cicatriz en el torso, similar a la que tenía Burdisso, Gómez confirmó que «es cierto que el cuerpo tiene una gran cicatriz, importante como esa.»
Además, se pudo saber también que el cadáver contaba con otras heridas y golpes en el cuerpo que ayudarán a los médicos forenses a definir las causas del deceso
Posteriormente, el titular de esta Unidad Regional relató que se pudo dar con este cuerpo por un hombre -presuntamente un cazador- que «sintió olores y dio conocimiento a la policía».
En horas de la tarde se habían realizado varias detenciones que podrían estar vinculadas con este hecho. Se trató de nueve personas que fueron detenidas como sospechosos de haberle dado muerte a Burdisso, entre ellas Córdoba, Brochero y Huck. Además, Gómez aseguró que una decena de personas habían sido citadas a declarar en la Comisaría IV de la ciudad de El Trébol.
Horas antes
La novedad se produjo en una finca donde desde bomberos y policías realizaban intensos trabajos de búsqueda. Los servidores habían estado en una vivienda de calle Libertad a escasos metros de la Cooperativa Agrícola Ganadera y el trabajo terminó después de las cuatro de la tarde en campos aledaños.
Esta vez, los vecinos de la ciudad de El Trébol se mostraron sorprendidos ante el despliegue de efectivos que patrullaron la ciudad. Unidades especiales en criminología de la ciudad de Rosario, Sastre y Santa Fe, con perros adiestrados, realizaron diversos operativos acompañados de un cuerpo de seis zapadores de Bomberos Voluntarios de El Trébol.
Los trabajos fueron diagramados y llevados adelante en un domicilio de avenida Libertad, en la propia casa de Burdisso, en calle Corrientes al 400, y en campos aledaños a la ciudad de El Trébol. Allí se secuestraron elementos, se excavó donde los perros podían dar alguna señal y se tomaron decenas de nuevas declaraciones a vecinos y gente que tuvo o tenía algún tipo de contacto con el ciudadano de 60 años.
Era Burdisso
Según fuentes confiables el cuerpo encontrado en el fondo del aljibe era identificado por sus conocidos como el de Alberto Burdisso. Los testigos detallaron que el cuerpo tenía una cicatríz en el abdomen que sería igual a la del hombre que buscan, aunque el cuerpo presenta varios días de descomposición. Todavía faltaba la confirmación policial que se realizará luego de la autopsia y terminó finalmente de asegurar la identidad del fallecido.
El trabajo de los Bomberos de El Trébol
El Jefe del cuerpo activo de Bomberos Voluntarios de El Trébol, Raúl Dominio, fue quien estuvo al frente del agotador rastrillaje que terminó rindiendo los frutos en la mañana del viernes.
«Vinimos en la noche del jueves con personal policial hasta esa tapera», había dicho Dominio y agregó: » Había rastros y todo hacía indicar que podía haber algo. Es un lugar desagradable aún de día, muy peligroso, y de noche no se podía seguir con la búsqueda», contó en ese entonces Dominio.
Ya este viernes, «vinimos con 18 bomberos y trabajamos a unos 10 metros de profundidad, con trípode y aparejos para extraer el cuerpo», manifestó Dominio, quien destacó el profesionalismo con el que se desempeñaron «del primero hasta el último» de los bomberos involucrados en la tarea